Q

ué opina de la postura de la Iglesia con el Gobierno?

En este momento, como en toda su historia, la Iglesia trata de ser fiel al Evangelio puesto que es la continuación de la vida de Jesús en la tierra y, por lo tanto, es el pueblo de Dios. Lo que pasa es que este pueblo está jerárquicamente organizado y tiene unos bautizados que han recibido el encargo de gobernarlo, de conducirlo... Estos obispos, sucesores de los apóstoles, tratamos de cumplir esa misión. Y con la colaboración de los sacerdotes y de los fieles predicamos el Evangelio en el momento concreto que nos toca vivir. En este momento la Iglesia trata de decir y de hacer lo que a su juicio cree que debe hacer siendo siempre fiel al Evangelio.

Pues parece que que la jerarquía eclesiástica está asumiendo un papel que correspondería más al PP.

La Iglesia está por encima de los partidos, no es partidista. Los clérigos nunca formamos parte de ningún partido. La Iglesia está predicando, está trabajando, está viviendo la caridad y la fraternidad... y lo que dice la Iglesia parece ser que unos lo interpretan de una manera y otros de otra. Pero esto no es de este momento, no es una novedad.

La ley del aborto ya estaba en vigor durante los años de gobierno de Aznar. ¿Por qué entonces no se les escuchó ninguna crítica?

Desde el primer momento que se habló del aborto se ha dicho que es un crimen nefando. Yo no me oriento por el PP, sino por la perspectiva de la Iglesia. Y la Iglesia está diciendo que el aborto es un crimen porque es un atentado contra la vida de un ser humano pequeñito e indefenso. Esta enseñanza la Iglesia la ha defendido siempre. Y lo sigue haciendo. Después, por parte de algunos se interpreta que es colocarse del lado de... Aunque no hubiera partidos políticos la Iglesia seguiría diciendo lo mismo.

Pero no negará que las manifestaciones de miembros de la Iglesia se han multiplicado durante estos años de gobierno del PSOE.

Más que el Gobierno socialista es el momento que nos toca vivir: la vida civil adquiere unas características que no ha tenido en otras épocas históricas cuando había unas formas de gobernar distintas. Los miembros de la Iglesia, por el hecho de serlo, no pierden sus derechos ciudadanos. Son personas y pertenecen también la sociedad civil. Si ellos se manifiestan será porque consideran que deben hacerlo. Es verdad que en otras épocas no había manifestaciones. De nadie. Ahora sí porque estamos viviendo unos momentos en que uno cree que debe defender sus derechos, y defenderlos a veces por esos cauces. Coincide con que esto es así en el momento que nos toca vivir, pero no es que haya un posicionamiento de la Iglesia frente al Gobierno. La Iglesia piensa en sus hijos, que son a la vez ciudadanos de la sociedad civil.

¿Coincide con García Gasco en que la política del Gobierno conduce a la disolución de la democracia?

No juzgo esa afirmación porque no sé en qué sentido la dijo ni qué alcance quería darle. Lo que sí digo, y lo digo como fruto de lo que he estudiado y madurado, es que los ciudadanos de la sociedad civil en buena parte somos los miembros de la Iglesia. Ahora, no sé la influencia que pudiera haber entre una y otra institución.

Volviendo al aborto y puesto que se van a seguir practicando, ¿cuál cree que debe ser la postura de los poderes públicos para garantizar la vida de las mujeres?

Ellos lo sabrán porque son los que tienen que tomar las determinaciones. Yo tengo mi postura.

Eso es lo que le pregunto.

Mi postura es que nunca la vida de una persona puede depender del comportamiento de otras porque nadie es dueño de nadie. La Iglesia defiende que la vida es sagrada y hay que defenderla siempre.

¿La de la mujer también?

Claro, la de cualquiera. Pero, ¿por qué unas mujeres pueden ser madres y otras no?

¿Se ha parado a pensar que cuando una mujer aborta puede que no tenga otra salida?

Yo creo que hay muchos casos y que cada mujer abortará por unas razones distintas, alguna porque esté convencida de que puede o debe, otras porque se lo dicen, por amenazas... A veces afirman: "es que va a haber una malformación", pero yo conozco quien ha dicho "sea lo que Dios quiera" y luego ese niño ha nacido y se ha desarrollado. Si esa mamá accede, ¿se queda tranquila? Dicen todas, o la mayor parte de las que han abortado, que les queda luego una actitud pesarosa que no se borra.

¿No habría entonces que facilitar aquello que se pueda?

Yo no iría a eso sino al hecho de que nadie, ni siquiera las autoridades, es juez de la vida de nadie. La vida es sagrada y hay que protegerla. Todo lo que se haga en ese sentido me parece que es constructivo.

¿Justifica entonces el diálogo con ETA para evitar más muertes?

¿Evitar más muertes? Para dialogar hay que hacerlo entre dos estamentos que estén al mismo nivel y un gobierno nunca puede estar a la altura de ETA ni ETA puede estar a la altura de un gobierno.

¿Ni aunque el fin último sea proteger vidas?

Dialogar es concederle a ETA algo que no tiene.

La Iglesia mantiene que la ley que permite matrimonios entre personas del mismo sexo puede acabar con la familia. ¿Por qué?

Uno nace en una familia de un hombre y una mujer. En el orden humano se pide eso. Uno busca en el diccionario qué es un matrimonio y dice que es la unión estable y duradera de un hombre y una mujer. Si nos colocamos dentro de la Iglesia elevamos la familia a la categoría de sacramento: la familia cristiana nace de la recepción de un sacramento por parte de un hombre y de una mujer. A partir de ahí viene la familia y lo que vaya por otro camino no es fruto de un sacramento. La institución familiar que nace de la unión sacramental está en vías de crecimiento. Lo que sea parafamiliar, parasacramental, paraunional... es una cosa que no se define con el concepto de lo otro.

Y lo que va por otro camino, como usted dice, ¿dificulta que su concepto de familia crezca?

Yo creo que sí, que lo dificulta.

¿Dispone de algún dato para apoyar esta afirmación?

Pues el funcionamiento de la sociedad actual. ¡Ya ve como está! Esos son los datos.

¿Cómo está la sociedad?

Como está. La veo como está y está como la veo.

¿Y cómo la ve?

Creo que no vamos por buen camino, que tendríamos que reconsiderar y buscar una reflexión más seria, más consciente y, a partir de ahí, ver qué medidas tomar.

¿Se ha planteado considerar la ley como un reconocimiento de derechos a quienes los tenían vetados?

De derechos no. Serán concesiones de otro tipo porque los derechos están claros, los conocemos perfectamente.

¿Y el derecho a casarse con independencia de la tendencia sexual?

¿Qué es casarse? Hasta hace unos años dos personas del mismo sexo vivían juntas, y eso tenía un nombre. Además, ¿quién les ha dado los derechos? ¿Se los pueden dar quienes no los tienen?

La ley garantiza ese derecho.

La ley es la ordenación de la razón para el bien común. ¿Ahí hay ordenación de la razón? ¿Se cumple la definición de ley? Y, además, todo lo legal no coincide con lo moral.

¿Ve inmorales estas uniones?

Todos los actos humanos son morales, pero hay moralidad buena y mala. A mí el señor me ha dicho que predique el Evangelio y en el Evangelio no se enseña eso, luego no lo debe predicar la Iglesia.

Pero también hay sacerdotes homosexuales.

No, no debe haberlos.

Sería el único colectivo en que no los hubiera porque homosexual se nace.

¿Y eso quién lo dice? La biología dice que normalmente es una enfermedad, lo que pasa es que en algún caso puede haber una situación concreta que tenga otra explicación y tal, pero normalmente nadie quiere ser homosexual.

Si un sacerdote de su Diócesis le dijera que es homosexual, ¿usted que haría?

Trataría de ayudarle como persona pero no le fomentaría que fuera homosexual, ni le ayudaría a serlo. Por el hecho de tener una tendencia no hay que fomentarla. Hay quien tiene tendencia a guardarse las cosas que no son suyas y...

¿Está comparando la homosexualidad con la cleptomanía?

Digo que las tendencias hay que examinarlas. Si una tendencia es buena, apoyarla, y si es mala, corregirla.

En cualquier caso, se trataría de reconocer un derecho.

No, hay derechos que son iguales para todos, que todos tenemos que defender. Ahora bien, usted tiene un derecho por ser periodista que yo no tengo.

Y usted un derecho por ser obispo que tampoco tengo yo. Pero estaba hablando de derechos fundamentales.

Los fundamentales son pocos.

¿Cuáles son para usted?

No sé, el derecho a la vida, por ejemplo.

¿Y la igualdad?

Sí, como aspiración. Luego, hay que facilitarla.

Es lo que ha hecho esta ley que tan poco gusta a la Iglesia.

¿Por qué no facilita entonces que todos tengamos la misma altura?

Porque es imposible.

Por eso no es un derecho, porque es imposible. Una cosa es que una norma dé unas concesiones, pero la normativa tiene que ser justa, una ordenación de la razón, del bien de la comunidad, de las personas. Y si no es el bien, pues a lo mejor no hay que legislarlo.

Usted no ve que esto sea el bien.

Cosas como éstas no son el bien, cosas que estamos viendo, sufriendo y padeciendo.

¿Qué estamos sufriendo?

Que no tengamos la libertad de opinar. O que hacerlo se interprete como una intromisión.

Libertad de opinar tenemos todos. La Iglesia lo está haciendo y no ha habido ningún problema.

¿Ningún problema? ¿Ha dejado de haberlos? Te censuran que lo hayas dicho. La gente que convocó la reunión de Madrid tenía derecho a hacerlo y se está viendo como si fuera una galaxia que cayó del cielo. Tenían derecho a hablar, lo hicieron y yo no puedo juzgarlo. Nadie me ha hecho juez. Y a los periodistas tampoco. Hay un límite y el derecho de una persona termina donde empieza el de otra.

¿Cree que el divorcio exprés incita a que se separen más parejas de lo que lo harían si no existiese?

Esta ley ha facilitado el divorcio de una forma tan fácilmente lograble que se resuelven las cosas de la noche a la mañana cuando son cuestiones más serias que hay que estudiarlas con seriedad. En vez ayudar a que se resuelvan los problemas de la familia se facilita que se disuelva cuanto antes.

¿Por qué considera inaceptable la asignatura Educación para la Ciudadanía?

Porque los padres tienen el derecho a educar a sus hijos y hay que respetarlo. Nadie puede asumir ese derecho y quitárselo a ellos.

¿Considera que se ha hecho eso?

Si mandas a un niño al colegio y le forman de un modo que tu no quieres, han retirado ese derecho.

El que después de la campaña en contra no haya llegado al centenar los padres que se han opuesto ¿no da qué pensar?

El planteamiento es distinto. ¿Los padres tienen ese derecho? Pues reconózcase.

¿Qué es lo que no le gusta de esta asignatura?

Esa asignatura pretende educar a los hijos cuando son los padres los que deben hacerlo. Se invoca que en otros lugares de Europa existe esta materia pero el contenido no es el mismo que aquí. Hay razones poderosas para que no se admita.

¿Qué le parece rechazable de su contenido?

Que se educa en un sentido que no es el que quieren muchos padres.

¿Quién dice eso?

Los padres lo dicen. Y el número de los que se oponen no es ínfimo.

Usted ha dicho de esta materia que no se puede aceptar "porque impone normas de comportamiento y evalúa una determinada formación de la conciencia". ¿No se parece a la Religión?

No, porque en Educación para la Ciudadanía se habla de la unión de un hombre con una mujer, de la unión de dos chicos, que hay que experimentarlo todo... Eso es lo que los padres no quieren.

¿Sería mejor fomentar los homofobia?

Sería igualmente censurable. ¿A usted se la han fomentado sus padres?

No, pero mis padres nunca me dijeron que la homosexualidad es una enfermedad.

A lo mejor porque no surgió el problema. Pero mantengo que el derecho a la educación es de los padres. El Estado está para que subsidiariamente acuda en su auxilio.

¿La Religión tendría que impartirse en las parroquias en vez de hacerlo en los colegios?

Que haya libertad y habiéndola, se escoge. La Iglesia nunca ha pedido que la Religión esté obligatoriamente en los colegios.

Pero la Iglesia protestó cuando se planteó sacarla.

Porque se quitaba del todo.

Pero si nunca lo ha pedido...

La Iglesia ha pedido que se ofrezca y que si los padres que quieren, se dé, que es lo que está sucediendo.

En una sociedad multiétnica, ¿están obligadas todas las religiones a entenderse?

Obligadas no. Todas tienen su campo. Es una oferta y que cada cual escoja.

¿Y a autofinanciarse?

En principio también, porque cada uno ayuda a aquello que le gusta. Tú te haces de un club y colaboras con tus cuotas.

Luego usted es partidario de que el Estado no aporte nada la Iglesia.

Ese paso ya está dado, ya no se recibe ninguna financiación del Estado. Sólo se pide a los fieles que colaboren. Ahora, si los musulmanes quieren un lugar de culto, pues que lo compren y lo mantengan.

¿Qué piensa que de se concierten estudios mientras en la enseñanza pública se multiplican los barracones y de que sea precisamente la pública la que asuma todo el peso de la inmigración?

Yo no tengo datos pero que haya libertad, que la Iglesia tenga sus centros y el Estado los suyos.

¿Y el veto de la concertada a los inmigrantes?

Esa afirmación hay que retirarla porque no se veta sino que se está admitiendo y se tiene buena mayoría de inmigrantes.

Los datos no dicen eso.

Pues a lo mejor van a la pública porque la prefieren, porque no se les cobra nada al ser una enseñanza que está costeada por todos, por mí también. En otros lugares hay un bono escolar y se puede elegir el colegio que se quiera. Eso sería lo deseable.

¿Sabía que gracias a los alumnos inmigrantes procedentes de América Latina se está frenando la caída de la matrícula en Religión?

Sé que en algunos colegios ha bajado y en otros ha aumentado. ¿Sabía que gracias a los inmigrantes se mantiene la natalidad en España? Pues ese factor está influyendo en eso, en lo otro y en lo de más allá.

Acaba de cumplir sus dos años en la Diócesis. Para alguien que vivía en Castilla, ¿le supuso mucho choque Alicante?

No me supuso ningún choque aunque la situación es distinta: las personas tienen otro carácter, otra manera de ser. Y creo que hay muchas posibilidades, muchos medios, mucho campo de trabajo.

¿Le ha dado muchos problemas esta Diócesis?

Muchos no. Me gustaría que hubiera más sacerdotes y que los fieles seglares estuvieran más formados.

¿Faltan vocaciones?

La Iglesia siempre ha tenido altos y bajos y lo que se nos reclama es que pidamos vocaciones y las fomentemos. Una señora me pidió una vez un párroco y yo le respondí que me enviara tres seminaristas y yo le mandaba un sacerdote. La señora dijo: "señor obispo, es que ahora no tenemos hijos". No tienen hijos, le respondó, pues entonces, ¿de dónde van a caer los seminaristas? ¿del cielo como las estrellas? Habrá que pensar que todos somos responsables de lo que sucede.

¿Qué opinión le merece el nuevo Prelado de los Jesuitas?

Es un hombre muy espiritual y muy conocedor de la compañía.

¿Cómo interpreta que el Papa oficiara una misa de espaldas?

Es una interpretación mala que han hecho los medios. El Papa celebró la misa en la Capilla Sixtina, que tiene el altar de espaldas al pueblo, luego lo hizo como hay que hacerlo cuando el altar está así. ¿Ve como todo se puede interpretar mal?

¿Todos los medios lo interpretaron mal?

Quien lo hiciera, que habrá sido una agencia, ha embaucado a todos y nadie se ha parado ha pensar.

Hablando de medios, ¿qué opina del periodismo que hace el que tiene la Conferencia Episcopal?

Hay cosas que las hace muy bien y otras cosas que no se hacen tan bien porque hay elementos humanos y hay que respetar la libertad y... bueno, la emisora no es sólo de la Conferencia, hay otros accionistas que están en la Cope.

¿Qué cosas no se hacen tan bien?

La parte mala es que... cuando hay una persona que no hace las cosas bien, si tengo oportunidad le digo que trate de corregirse, pero nada más, no empiezo a cacarear por aquí y por allá porque entonces no se consigue nada bueno.