Miguel Valor explicó ayer que el restaurante que se planteó construir frente al salón Felipe II del Castillo de Santa Bárbara, tendrá menos altura de la prevista inicialmente y probablemente se retranquee "porque no ha gustado que fuera encima de la ermita de Santa Bárbara". El edil manifestó que se tomaría como ejemplo el restaurante del parque de la Ereta, pues iría "abancalado" y en todo caso, la actuación que se lleve a cabo sería "reversible". Además, habrá otros bares o cafeterías por la fortaleza.

También será desmontable la gradería y el escenario que se montarán encima del cuartel ya que el concejal prevé que se utilicen principalmente en verano. Miguel Valor aseguró que los gruesos pilares del edificio permiten soportar este peso.