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ÁNGEL FRANCO CANDIDATO SOCIALISTA AL SENADO

ENTREVISTA

s décadas en el Senado, cuatro años en el Ayuntamiento de Alicante y ahora parecía que le llegaría la tranquilidad de la jubilación. ¿Por qué vuelve ahora como candidato al Senado?

Es que yo no me he ido nunca. Siempre he estado a disposición del partido en un sitio o en otro trabajando en las campañas y en la agrupación con otros compañeros y, cuando se me ha pedido, he dado mi opinión. Es verdad que me he jubilado profesionalmente pero yo, insisto, no me he retirado nunca de la actividad política. En este punto, el partido ha considerado que mi experiencia y mi trabajo podía ser útil para esta nueva andadura en el Senado y voy a afrontar la campaña con la máxima ilusión.

Va en un puesto para no salir electo, como apuntan todas las encuestas. ¿Se coloca usted para el congreso del PSPV?

Las encuestas apuntan que estamos remontando posiciones y, en mi opinión, al final, puede producirse un "sorpasso" que nos otorgue la mayoría. No contemplo otra posibilidad. Al final de la campaña, la gente va a tener que decidir entre el futuro, Zapatero, y el pasado que representa Rajoy. Nuestro resultado va a sorprender a propios y extraños. Dicho eso, yo estoy en una lista al Senado y lo demás me da igual. Lo que pase en el partido lo tendrán que decidir los militantes en asamblea que es donde se deciden las cosas del partido. Nuestros electores lo que están esperando son nuestras propuestas de futuro. Nada más.

¿Por qué cargos socialistas le cuestionan a usted y no a Azorín, que encabeza la lista al Senado, pese a que cayó derrotado en mayo en las municipales de Elda?

Siempre hay discrepancias. Me pasa a mi pero fíjese el problema que tiene el PP con Trillo, con Gallardón, con Zaplana y hasta con el alcalde Alperi. Gente a favor y en contra hay en la selección de fútbol. Mi propuesta salió por unanimidad tanto en la ejecutiva local y en la gestora como en el comité federal.

El PP coloca a un candidato, Federico Trillo, que suma ya casi tantos mandatos como los que llevaba usted en Madrid en el Senado.

Yo siempre he dado lo mejor de mi mismo durante mi etapa en el Senado con múltiples iniciativas mientras que a este señor sólo se le conocen dos grandes eventos en tantos años: un desfile militar y un monumento que causa estupefacción y que es un culto a la estupidez y a la guerra. Mientras los socialistas hemos aprobado las listas por unanimidad, el PP está dando con sus candidaturas un espectáculo lastimoso en el que ha ganado la híper extrema derecha.

A usted nunca le han gustado los independientes. Ahora tiene a uno, el ministro Bernat Soria, al frente de la lista al Congreso.

Me parece muy bien. Los activos tienen que estar junto a un partido que debe ser abierto. Es una persona que trabaja en la solución de problemas que afectan a la gente y que, por tanto, nos ayudará a que el Partido Socialista sea más creíble ante la situaciones de los ciudadanos.

Ahora que tiene tiempo de pasear. ¿Cómo ve las calles de Alicante?

Es una lástima porque nos quedamos a las puertas de lograr la Alcaldía y el PP gobierna con menos votos que la suma de las papeletas de la izquierda. Veo una ciudad triste, dejada de la mano de Dios, retrasada y que no sabe demasiado bien hacia dónde va. Hay grandes planteamientos estratégicos, caso del soterramiento o del Palacio de Congresos en Sangueta, que nosotros apoyamos en su día porque eran positivos. El alcalde parece que está más en otro sitio. No se gestiona nada y encima, Camps, en muchas cosas, está desequilibrando la balanza en dirección a la ciudad de Valencia.

Coincide entonces con Valenzuela, su enemigo histórico, en sus denuncias por la discriminación de Alicante en relación a Valencia.

Totalmente. Camps está haciendo dejación de funciones en Alicante. No tiene ninguna estrategia y, por tanto, ninguna prioridad. Frente a ese abandono y marginación, el Gobierno central, en mi opinión, se lo ha tomado muy en serio. Hemos abierto nuestra provincia a una expansión con el AVE que nos sitúa a dos horas de Madrid o a cuatro de Bilbao cuando el PP en 2004 no había puesto ni una traviesa; el PP sólo se dedica a bloquear las soluciones para el agua como las desaladoras y a utilizar el tema como un instrumento para crispar y engañar; y también debe recordarse, obviamente, la mejora de las infraestructuras del aeropuerto de El Altet.

Hablando de Alicante y de sus cuatro años como edil. ¿Volvería a votar a favor del plan Rabasa?

La dirección del partido tomó una decisión que acepto y defiendo. No tengo nada más que decir. Dicho eso, es evidente que Alicante tiene un problema con la vivienda social que es preciso hacerla donde sea porque hay gente que no puede esperar. Hay que ver cómo se puede acelerar el trámite para construir ocho o nueve mil viviendas protegidas. Y para eso es preciso que el plan general de Alicante se acelere y que constructores y promotores puedan construir viviendas protegidas. Debe ser un objeto de reflexión.

¿También en Rabasa?

Toda ordenación nueva debe tener un 35% de vivienda social distribuida en toda la ciudad. Y los proyectos que no cumplan ese criterio deben ser rechazados...

Insisto, ¿Rabasa?

Deben darse esas premisas en todos los planes que se aprueben. Rabasa ahora mismo depende de la Generalitat y allí habría nueve mil viviendas protegidas. La posición está clara y si hay algún cambio, el partido adoptará la postura que decida la dirección local y la del PSPV como siempre ocurre.

¿Hacía el grupo municipal anterior más oposición que el que encabeza ahora Etelvina Andreu?

Es muy difícil hacer oposición. Hay veces que se hace poca pero tiene un gran eco mediático y otras que se hace mucha y no tiene ese reflejo. Entonces era una oposición constructiva y ahora también. Se está haciendo lo que se tiene que hacer en estos momentos.

¿También está haciendo lo correcto Roque Moreno en la agrupación local del PSPV en Alicante?

Lo hace muchísimo mejor que cuando yo dirigía el partido.

¿Hizo bien Pla en dimitir?

Los socialistas tenemos que dar ejemplo, frente a cargos del PP como Alperi o Fabra bajo sospecha, con una política transparente. Ignasi Pla demostró una enorme generosidad al anteponer los intereses del partido a los suyos. Tuvo un error de pago que corrigió y, en ningún caso, hubo prevaricación. Decisiones como esa nos fortalecen.

¿A quién ve usted como candidato a la secretaría general del PSPV en el congreso de julio con la difícil situación que lastra el partido?

A los ciudadanos le interesan los problemas que ellos tienen. El partido tendrá su momento cuando pasen las generales. No les preocupa quién va a ser el candidato a dirigir el partido sino que se tomen cuantas medidas sean útiles para ampliar el protagonismo y mejorar la situación de la provincia.

¿Entiendo que apuesta por dar más protagonismo a la provincia en la dirección del PSPV?

Lo veremos cuando toque. Yo lo único que he dicho y que repito es que en el contexto de la Comunidad, Alicante debe tener más protagonismo porque no está bien tratada. Y ahora vienen estos señores con un plan estratégico con el que tapar su mala gestión y lanzar una cortina de humo cuando lo que necesitamos no es eso sino una estrategia que tenga financiación.

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