L os hoteles de la Costa Blanca cerraron el pasado mes de agosto con una ocupación media récord del 90% acompañada de buenos ingresos, algo que no se recordaba desde el año 2000, según apuntaron ayer fuentes de la Asociación Provincial de Hoteles y de Hosbec, ésta última representativa de la planta de Benidorm. Salvo en Elche y El Campello, donde hubo caídas de tres y cuatro puntos, en el resto de los municipios se superaron con creces los porcentajes de ocupación de 2006. En Alicante, los hoteles lograron ocupar el 82,48% de sus plazas, un 3% más que en agosto del año anterior. Santa Pola casi llenó todas las habitaciones (95,5%); - cinco puntos más - y sólo hubo resultados menos aceptables en Elche (71%); y El Campello (88%);.

Los hoteles de Benidorm, principal municipio turístico de España, alcanzaron una ocupación media del 96%, 2,2 puntos por encima de los resultados de 2006, y lo que representa el mejor registro en temporada alta desde el año 2000 en la ciudad. Los datos hechos públicos ayer por la patronal Hosbec, y que también tienen en cuenta los niveles turísticos en otros puntos de la Costa Blanca, dan por cumplidas las previsiones iniciales del sector, que ya avanzó que todas sus esperanzas para salvar el verano estaban depositadas en el turismo nacional. De hecho, del total de turistas alojados en los hoteles adscritos a la asociación de Benidorm, el 56,3% fueron clientes procedentes de España, mientras que el 44,5% restante residían en el extranjero, fundamentalmente en Reino Unido (30,8%);, Portugal (5,4%); y Bélgica (2,4%);. Finalmente, la «atípica» meteorología registrada, sobre todo, a partir del «puente» del 15 de agosto no ha logrado empañar estos buenos resultados, que para el presente mes está previsto repetir si se tienen en cuenta las previsiones de ocupación de la patronal, fijadas en un mínimo del 92,6%.

Fuentes de la patronal mostraron ayer su satisfacción por estos resultados, que según Hosbec confirman «la paulatina recuperación» por la que atraviesa el sector a pesar de que «la economía de las familias cada vez obliga a ajustarse más el cinturón». No obstante, voces algo más críticas manifestaron que, pese a los buenos registros de ocupación, la rentabilidad de la industria turística está cada vez más «por los suelos» y aprovecharon para criticar a la presión de los mayoristas por mantener los precios -congelados por sexto verano consecutivo- y a las rebajas y ofertas de última hora «necesarias» para llenar las plazas. El balance de ocupación indica que los hoteles con mejor ocupación fueron los de dos estrellas, con un 96,9% de las plazas reservadas, seguidos de los de tres (95,5%); y los de cuatro (95,3%);.

Javier Luri, presidente de la Federación Hotelera de la Comunidad Valenciana, alabó el buen nivel de gasto. «Por lo menos en los hoteles no hay turistas de bocadillo».