El vestíbulo principal del Hospital de San Juan amaneció ayer con varias goteras al obstruirse la tubería que recoge el agua que sale de las máquinas del aire acondicionado y reventar. El centro solucionó este imprevisto de forma provisional colocando varios cubos para recoger el agua y acotando la zona afectada para que ningún paciente o visitante del hospital se viera afectado por este contratiempo mientras el personal de limpieza mantuvo el suelo seco. Asimismo la canalización fue desviada a un cuarto de baño cercano sin que nadie resultara afectado por el escape del agua.