Sanidad impulsa en Alicante una base de datos de pacientes que viven en soledad

CIE y Nanda serán los códigos que utilizarán los servicios médicos y de enfermería para diagnosticar la soledad y la indigencia, y codificarla en una base de datos en la que están trabajando las enfermeras gestoras de casos complejos del área de salud Alicante-Sant Joan. Un plan de intervención comunitaria en prevención de la soledad no deseada impulsado por la Conselleria de Sanidad para que estas situaciones figuren en la historia clínica de los pacientes y poder actuar así contra su aislamiento social.

El objetivo es diseñar “una acción conjunta y coordinada entre todos, ayuntamientos, servicios sociales, asociaciones y atención sanitaria para aunar esfuerzos y combatir la soledad, empezando por visibilizarla y que la sociedad en general la tenga presente”, ha explicado Mar Luri, enfermera gestora de casos complejos del Hospital Universitario de Sant Joan d’Alacant. Estas profesionales están en contacto continuo con estos casos de soledad no deseada, y detectan cada vez más en ancianos, matrimonios mayores, enfermos crónicos o en cuidados paliativos y personas con enfermedad mental.

El Censo de Población y Viviendas refleja que la cifra de personas que viven solas ha experimentado un aumento considerable y se sitúa en 209.736 en la provincia de Alicante. De ellos son 60.608 de mujeres mayores de 65 años y 28.267 de hombres a partir de esa edad.

La reacción de Hermógenes de 91 años al ser interrumpido por una llamada de venta por teléfono durante la I Jornada de la Soledad

Recursos adecuados

Uno de los primeros pasos a dar con la implementación de este plan de intervención de Sanidad, tras sensibilizar a la población y dar visibilidad al problema, es detectar y codificar a la población afectada. “Lo primero es crear una base de datos con todos los pacientes que viven en soledad o en la indigencia para calcular la dimensión del problema y empezar a actuar con los recursos adecuados”, ha comentado la enfermera gestora de casos. Los detalles de este proyecto se han desvelado con motivo de la I Jornada de la Soledad que ha celebrado el departamento este jueves con el lema “MI SOLedad” en el salón de actos del Hospital Universitario de Sant Joan.

Esta primera edición ha contado con la presencia de las concejalas de Bienestar Social y de Mayores del Ayuntamiento de Alicante, María Begoña León y Nayma Beldjilali, respectivamente. El departamento gestiona cuatro centros de salud en Alicante capital y otro en la Playa de San Juan, así como los de Xixona, Mutxamel, El Campello y Sant Joan d’Alacant. En futuras ediciones el objetivo es trasladar la jornada e implicar a los otros cuatro municipios cuya población está adscrita al área de salud.

91 años

De esta primera jornada, especialmente emocionante ha sido el testimonio de Hermógenes Fernández, un hombre de 91 años que vive solo y es paciente del centro de salud de Santa Faz, en Alicante.

Hay que tener en cuenta, según ha indicado Mar Luri, que "la soledad incrementa los riesgos para la salud física, psíquica y puede empeorar la calidad de vida de las personas con una mayor asistencia a los centros de salud, hospitalizaciones, atención domiciliaria, más institucionalización y aumento de la mortalidad". "Además, las personas que viven en soledad adquieren hábitos no saludables como sedentarismo, tabaquismo, consumo excesivo de alcohol o mala alimentación, y sufren peor calidad del sueño. Las personas mayores son susceptibles de padecer mayor número de caídas, deterioro cognitivo y reingresos”, ha explicado.

El gerente del departamento, Juan Antonio Marqués, ha señalado que “esta jornada es un primer paso de los muchos más que debemos dar todos los implicados, desde los gestores de las distintas administraciones y entidades sanitarias a los profesionales, asociaciones y ciudadanos en general, todos debemos juntar nuestros esfuerzos para combatir la soledad no deseada”.

«Está demostrado que la soledad es un predictor tanto de morbilidad como de mortalidad»

Por su parte, la directora de Enfermería de Atención Primaria, Fabiola Marrades, ha querido agradecer en su intervención “la gran labor que realiza nuestro equipo de enfermeras de casos complejos tanto de los centros de salud como del hospital en la atención a las personas que viven en soledad”.

Entre las funciones de estas profesionales, ha apuntado, “facilitan un teléfono de contacto directo a los pacientes que atienden, les gestionan y unifican citas, les revisan y adecúan la medicación, los acompañan durante sus visitas al hospital, por ejemplo, para intervenciones que en caso de acudir solos no se realizarían. Enlazan los diferentes niveles asistenciales, evitando ingresos y acortando estancias hospitalarias. Derivan a los pacientes al trabajador social para su valoración y movilización de recursos y también realizan visitas domiciliarias”.

OMS

Durante este encuentro se ha dedicado una redonda al "Edadismo y soledad", moderada por la directora de Enfermería del departamento, Inmaculada Ávalos, con Vânia de la Fuente Núñez, consultora independiente sobre salud global y envejecimiento saludable, quien ha dirigido la campaña mundial contra el edadismo de la OMS y es coautora principal del Informe Mundial de la ONU sobre la materia.

También ha participado Pepa Martínez, enfermera gestora de los centros de los centros de salud Gerona y Santa Faz de Alicante quien ha indicado que “de todas las personas con las que trato, las que más asistencia necesitan son las que viven solas y requieren una especial atención, entre ellas las personas con enfermedad mentaly quienes viven en la calle".

La soledad sigue al alza en Alicante con casi 210.000 personas que viven sin compañía

Así, ha abundado en que cualquier persona que padece una enfermedad grave precisa de una red de apoyo sólida, pero en nuestra sociedad ese soporte recae en la familia y/o las relaciones sociales." Las instituciones no están preparadas para atender la soledad y, mucho menos, a las personas solas enfermas", ha afirmado.

La soledad, sin edad

Mar Luri, por su parte, ha destacado que “la soledad no tiene edad, puede afectar a cualquier persona y en especial a colectivos vulnerables y personas frágiles como ancianos, indigentes, cuidadores, y enfermos”.

En la jornada también ha quedado patente que la intervención individual es menos efectiva que la grupal. En este plan de intervención se pretende que las personas que viven en soledad sean capaces de, al tiempo que reciben ayuda, relacionarse con otras personas a las que también podrán servir de apoyo. Además, se trabajará para crear redes intergeneracionales, con la tecnología como aliada y se tratará de potenciar la autonomía de las personas mayores, con planes de acción y actividades sociales y culturales.

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La segunda mesa redonda se ha centrado precisamente en hacer ver que las personas que viven en soledad "No son invisibles". La ha moderado la médica de Atención Primaria del consultorio Garbinet de Alicante Elisa Fernández quien ha comentado que ella, por ejemplo, pone en contacto a personas con soledad que detecta en su consulta y que cree que pueden congeniar y a partir de ahí han surgido relaciones de amistad y compañía.

La directora de la ONG Grandes Amigos, Mercedes Villegas, también ha querido estar presente en la jornada para explicar las acciones que ellos realizan en diferentes puntos del país, implicando a voluntariado para proporcionar compañía y amistad a las personas en soledad.

Además, Alba Pérez, la responsable de proyectos sociales y voluntariado de la Fundación para el Desarrollo de Acciones Sociales y Culturales de Alicante (DASYC), ha explicado que realizan acompañamiento con voluntariado y actividades y talleres dirigidas a distintos colectivos. Por último, la presidenta y fundadora de Alan’s Home, Ana Mata ha comentado que ayudan a las personas sin hogar a solicitar recursos, les dan techo y les facilitan trabajo.

También ha querido estar la presidenta de Cruz Roja Alicante, Antonia Navarro.