Alicante registró 14 bloques de apartamentos y 300 nuevas viviendas turísticas en el 2023

La Generalitat concede licencias para cerca de 2.000 nuevas plazas vacacionales en la capital

La intención de la consellera Nuria Montes es aprobar la nueva regulación antes de fin de año

Ubicación de los nuevos alojamientos turísticos registrados en Alicante en 2023.

Ubicación de los nuevos alojamientos turísticos registrados en Alicante en 2023. / A.J.F. (Elaborado con Google My Maps)

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

Los alojamientos turísticos siguen creciendo a gran ritmo en Alicante. La ciudad registró cerca de 300 nuevas viviendas vacacionales en el pasado año, además de la construcción o rehabilitación de 14 bloques dedicados exclusivamente a los alquileres de corta temporada. En cuanto al número de plazas, el total de apartamentos aportó 1.489 nuevas plazas a la oferta de la ciudad, mientras que los edificios completos podrán acoger a 470 personas.

Por barrios, como viene siendo habitual, la gran mayoría de los alojamientos individuales se encuentran en el Casco Antiguo, el Centro Tradicional y la zona de Playas, aunque cada vez son más frecuentes en áreas colindantes como Carolinas Bajas o San Blas, e incluso empiezan a establecerse en distritos más alejados. Del mismo modo se reparten los bloques de apartamentos: siete de los catorce se sitúan entre Alonfonso el Sabio, Federico Soto, la Explanada y el barrio de Santa Cruz. Otros cuatro se sitúan en el entorno de la Plaza de Toros y el Mercado Central, y solo tres se han abierto en otros barrios, todos ellos en Carolinas.

La consellera de Turismo, Nuria Montes, defiende que el incremento de alojamientos turísticos registrados en la ciudad de Alicante en el año 2023 muestra «la voluntad de este Gobierno por combatir la economía sumergida en el turismo» y por «establecer una ordenación adecuada de la actividad turística en toda la Comunitat Valenciana».

En este sentido, Montes ha explicado que «es necesario precisar la diferencia entre el incremento de la planta total de viviendas turísticas y las que constan en el registro oficial», ya que, precisamente, el hecho de que en 2023 el censo haya aumentado un 7,5% respecto al año anterior «demuestra que se está incrementando la actividad reglada» bajo el control de la Administración. 

En cuanto a los próximos pasos para su regulación, Montes ha vuelto a instar al Gobierno de España a «implicarse en la regulación de esta actividad para conseguir una legislación lo más unificada posible en toda España». La consellera también ha recordado que la Generalitat ultima una nueva ley para las viviendas turísticas que será consensuada con la parte privada, y cuyo objetivo pasa por «dar a los ayuntamientos autonomía para poder ordenar adecuadamente su actividad turística en función de sus necesidades».

En el caso del Ayuntamiento de Alicante, la concejala de Turismo, Ana Poquet, (que acudió recientemente a la inauguración de uno de los nuevos bloques de edificios) ha indicado en diferentes ocasiones que el gobierno local está estudiando la problemática de la proliferación de viviendas turísticas, aunque no se muestra partidario de una paralización de licencias, como pide la izquierda. En el apartado urbanístico, el alcalde, Luis Barcala, ya adelantó su intención de facilitar el acceso a suelo para ampliar la planta hotelera ante el «déficit importante de camas», pese a que todavía no se ha concretado en qué términos se va a materializar dicha medida.

Más inspección

La consellera de Turismo, Nuria Montes, también ha recordado que su objetivo de combatir la economía sumergida se ha visto reflejado en un considerable aumento de las inspecciones.

En el pasado año, el departamento autonómico impulsó 40 inspecciones que revisaron en torno a 200 apartamentos, lo que representa un incremento del 400% respecto al mismo periodo del año anterior, con el gobierno del Botànic al frente del Consell. «Tan solo seis actuaciones se iniciaron a raíz de una denuncia particular, lo que demuestra que se está haciendo una ordenación correcta y dimensionada de la actividad turística», apunta Montes. 

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