El Cenid ultima su herramienta de lectura fácil para personas con discapacidad dirigida a la Administración pública

El Centro de Inteligencia Digital de la UA ya ha iniciado contactos con 140 ayuntamientos para ofrecer en sus web esta aplicación que traduce el lenguaje técnico

Usuarios de APSA validan textos para que sean comprensibles para personas con discapacidad

Usuarios de APSA validan textos para que sean comprensibles para personas con discapacidad / Pilar Cortés

A. Fajardo

A. Fajardo

Hacer inteligible la lluvia de información que genera a diario la Admnistración pública especialmente para personas con discapacidad, pero también para las que no la tienen. Es el principal objetivo del último proyecto en el que está trabajando el Cenid, el Centro de Inteligencia Digital de la Universidad de Alicante (UA) de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) y de la Diputación de Alicante.

Se trata de la primera herramienta de lectura fácil en español, según sus impulsores, para traducir los textos y hacerlos accesibles a colectivos con dislexia o cualquier otra diversidad funcional, pero también a personas que no presentan ninguna discapacidad reconocida y que les resulta complejo entender el lenguaje más técnico de ciertas áreas.

Para conseguir esta adaptación de los modelos de lenguaje, el Cenid ya ha iniciado contactos con 140 ayuntamientos con tal de que puedan ofrecer en sus páginas web esta facilidad a finales de año. Después de dos ejercicios de intenso trabajo, codo con codo con expertos de APSA (asociación que desarrolla actividades dirigidas a mejorar la calidad de vida de personas con diferentes capacidades durante todo su ciclo vital) y con la ayuda de la inteligencia artificial, la herramienta Cleartext ya está disponible, a falta de incorporar mejoras.

El Cenid, durante la visita del ministro Escrivá hace unas semanas

El Cenid, durante la visita del ministro Escrivá hace unas semanas / Jose Navarro

¿Cómo funciona?

Una de las claves para facilitar la comprensión de los textos ha sido suprimir superlativos y evitar siempre que se pueda los anglicismos, de manera que, si se tienen que mantener en las informaciones que se traducen con este sistema, se explica su significado en un glosario. Entre otros ejemplos, también se sustituyen los números romanos o se apuesta por hacer más sencillo el uso porcentajes. Los investigadores del Cenid trabajan tanto en el léxico, el semántico y el sintáctico.

"Estamos acostumbrados a ver logos de sillas de ruedas y discapacidad en rampas, pero queremos trasladarlo a la información ya que mucha gente se queda fuera de la comprensión de textos", explica Paloma Moreda, profesora del departamento de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la UA e investigadora responsable del proyecto Cleartext.

La hoja de ruta que maneja el Cenid para poder hacer realidad esta necesidad para las personas con discapacidad es en agosto cerrar acuerdos con los ayuntamientos, según Manuel Palomar, el director del organismo, ya que los técnicos de Administración local les han reconocido que tienen que llegar a más gente a través de información comprensible.