La FP marítimo pesquera urge soluciones para facilitar las prácticas a los alumnos

Buscar soluciones para garantizar la formación práctica de los alumnos de Formación Profesional del sector marítimo pesquero es el principal reto al que se enfrentan los institutos que imparten estos estudios. La dificultad de los estudiantes para poder realizar la última etapa del aprendizaje de una formación de gran demanda de empleo, especialmente en la modalidad de maquinaria, está retrasando que se incorporen al mercado laboral, según Toñi Lorca, directora del Instituto Politécnico Marítimo Pesquero de Alicante, donde se forman casi 200 alumnos.

Los problemas para conseguir el embarque de los estudiantes de FP en buques de gran potencia y de grandes dimensiones son el principal obstáculo de este sector, una cuestión que ayer cobró protagonismo durante el encuentro celebrado en Casa Mediterráneo con centros marítimo-pesqueros de Canarias, Andalucía, Murcia, Baleares, País Vasco, Cantabria y Asturias.

El compromiso de las administraciones públicas para adaptar la formación a unas prácticas que sean viables es una de las esperanzas que tienen estos ciclos formativos para poder completar los estudios, al menos, así quedó de manifiesto durante los dos días de jornadas en las que los institutos de diferentes comunidades autónomas han compartido sus retos de futuro.

El director general de Casa Mediterráneo, Andrés Perelló, destacó la importancia de este encuentro, que «por primera vez ha reunido a los principales centros españoles dedicados a la formación marítimo-pesquera, con el objetivo de compartir experiencias y proponer líneas de trabajo que respondan a las necesidades de las personas y de los sectores productivos y económicos relacionados con el mar, una industria esencial en nuestro país».

El alcance del sector pesquero

El sector pesquero en España tiene una larga tradición. Con una amplia costa, la industria pesquera española da empleo a miles de personas y contribuye significativamente a la economía, sobre todo en las comunidades costeras. Según la organización, se estima que alrededor del 60% de todo el pescado que se consume en territorio nacional procede de aguas españolas. Esto convierte al sector pesquero en un contribuyente clave para la economía, proporcionando empleos e ingresos para muchas personas.

España se ha convertido en uno de los países líderes en producción pesquera, siendo una de las principales potencias de la UE en este campo, con una flota de 8.730 barcos, 31.000 empleos directos y 150.000 indirectos en la industria, con los últimos datos de 2021. Es un sector de relevancia para España y unos de los más potentes a nivel europeo, que se enfrenta a grandes desafíos, como la sobre explotación de especies y el cambio climático, pero también presenta grandes oportunidades para el crecimiento sostenible del sector, tal y como destacaron en la presentación de las jornadas.

El Pleno del Consell aprobó el pasado año el decreto de adscripción orgánica del Instituto Maritimo-pesquero del Mediterráneo, con sede en la ciudad de Alicante, a la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte y su transformación en centro integrado público de Formación Profesional (CIPFP). Pasó a llamarse Politécnico Maritimo-pesquero del Mediterráneo un centro que, hasta ahora, dependía de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica.