Los propietarios de las viviendas de Luceros y General Marvá cuyas fachadas son recayentes a la línea de fuego de las mascletàs se arriesgan a multas de hasta 600 euros si incumplen las medidas de seguridad que impone el Ayuntamiento de Alicante, que pasan por el cierre de las ventanas y balcones durante los disparos pirotécnicos, y la ausencia de personas en los miradores de los edificios afectados.

El Ayuntamiento, a través de las Concejalías de Fiestas y de Ocupación de Vía Pública, comenzó ayer a notificar a los propietarios el obligado cumplimiento de estas medidas preventivas para poder tener unas Hogueras «más seguras» dada la gran cantidad de pólvora que se quema y que «todos los alicantinos podamos disfrutar de uno de los actos más significativos y simbólicos» de las Hogueras. Este año las mascletàs están previstas para los sábados y domingos 2, 3, 9 y 10 de junio, éstas fuera de concurso, y entre el 16 y el 24 de junio, en la semana grande de Hogueras.

En las fiestas de 2017, una veintena de policías fueron llamando casa por casa en la plaza de Luceros para que los vecinos procedieran a cerrar todas las ventanas y balcones como medida de seguridad en la mascletà después de la explosión de dos cristaleras en distintas sesiones, una de ellas de un bar, causando heridas leves a una mujer. Otro vecino dijo ver cómo un cohete se colaba en su terraza, situada a bastante altura, y rompía los cristales.

No sólo llamaron a las puertas los policías para extremar las precauciones, también los Bomberos después de que la Jefatura amenazara con suspender las mascletàs si no se cumplían esas normas. Además, la Concejalía de Seguridad colocó carteles para que los vecinos cuyos inmuebles están dentro del área de disparo cerraran puertas y ventanas de la fachada «no permaneciendo en el exterior del edificio y ocupando, en su caso, las zonas preparadas para el público». Asimismo, se instaba a anticipar o retrasar la llegada y salida de la vivienda para no coincidir con el horario de restricción de seguridad. También se dieron consejos por megafonía.

Desde el Ayuntamiento explican que esta medida se enmarca en lo establecido en los respectivos planes de Seguridad y Emergencia así como en el Protocolo de Actuación Municipal emitido por el departamento técnico de Protección Civil y Emergencias. Aunque esta restricción no es nueva, el Ayuntamiento incide cada vez más en su cumplimiento. De hecho, las notificaciones se remiten personalmente, mediante providencia individual, a cada propietario de las viviendas situadas en el avenida General Marvá 4 y 6, así como en la plaza de Luceros 11, 12, 13, 15 y 16. En las notificaciones se advierte que la desobediencia a este mandato puede dar lugar a la incoación de un expediente sancionador por infringir la ordenanza reguladora del disparo de fuegos de artificio en el municipio de Alicante. En concreto, del artículo 25.1d, que indica textualmente que se considera infracción leve «la desobediencia a las órdenes o mandatos de la autoridad municipal o de sus agentes, en el ejercicio de las funciones que, en esta materia, tienen encomendadas».

Las infracciones leves están penadas en esta ordenanza con multas de hasta 600 euros.