La caída del sistema informático por un "colapso" según fuentes de Educación, ha dejado esta mañana colgados ante el ordenador al millar de alumnos de la provincia que por sorteo están haciendo las pruebas diagnósticas esta semana para que la conselleria pulse el nivel del sistema educativo.

Los 44 colegios e institutos de la provincia -122 en toda la Comunidad- implicados en estas pruebas de reválida que exige la Lomce y que Educación reduce a tan solo una muestra tanto de centros como de alumnos -25 en cada uno de los que han salido por sorteo- se está viendo desbordados por unos exámenes generales en todo el país que ya habían obligado a posponer y reorganizar las evaluaciones finales de curso.

Según la información que desde Educación se ha transmitido a los centros, en todos ellos deben volver a convocar las pruebas diagnósticas previstas tanto para hoy como para mañana hasta el jueves y viernes de la próxima semana.

Desde los centros consultados expresan el trastorno que este fallo informático les genera especialmente a los estudiantes de Secundaria, nerviosos ante un final de curso en el que están interfiriendo estas pruebas diagnósticas que, aunque no cuentan en su expediente académico porque son anónimas, sí influyen en su tranquilidad a la hora de afrontar les exámenes finales que sí les puntúan en cada centro.

En el caso de Secundaria las pruebas que se posponen son las de competencia matemática y de ciencias sociales que debían celebrarse hoy, además de las de Valenciano que estaban previstas para mañana.

Las dudas desde los servicios técnicos de Educación para resolver el problema informático a tiempo han llevado finalmente a demorar las pruebas una semana.

Los alumnos que esta mañana se sentaron a las 9:00 horas ante el ordenador en el aula de informática para completar las pruebas no han podido ni quiera iniciarlas.