La guerra interna en Guanyar que se recrudeció el pasado mes de noviembre, tras la ruptura del tripartito de Alicante, pareció calmarse tras la reciente decisión del bando de Domínguez de dar marcha atrás y mantener entre los asesores a la mano derecha de Pavón. Una postura que se tomó, según fuentes internas, con el objetivo de calmar las aguas y a petición de la nueva dirección de EUPV. Sin embargo, apenas dos semanas después de alcanzar un acuerdo, Domínguez está en el alambre forzado por la posición del otro sector.