Un informe externo sobre los riesgos laborales en el Observatorio de Medio Ambiente de Alicante alerta de deficiencias en unas instalaciones que se inauguraron hace apenas un año tras un lustro de obras repleto de conflictos. El documento, remitido por la entidad evaluadora al Ayuntamiento de Alicante el pasado mes de abril, insta a la Concejalía de Medio Ambiente a adecuar las instalaciones para evitar caídas al mismo y a distinto nivel del personal municipal, fatiga visual y desajustes de temperatura, entre otros riesgos identificados en una instalación cofinanciada con fondos europeos.
El informe de sesenta páginas subraya la «ausencia de barandillas y protecciones reglamentarias en el acceso a distintos puntos elevados del centro» y la existencia de «cables y obstáculos en las zonas de trabajo», lo que puede provocar la caída del personal. Además, se advierte de «deslumbramientos en general y temperaturas elevadas por incidencia de la luz solar directa durante toda la mañana por todo el lateral del centro que dispone de tabiques acristalados», que a su vez pueden generar desde «choques contra objetos inmóviles a la fatiga visual» del personal. De hecho, según fuentes municipales, trabajadores del centro han apilado cajas en determinados puntos para reducir la incidencia del sol a través de los ventanales que rodean el centro.
El informe, por otro lado, también subraya la existencia de «agua y humedades en los aseos», que al igual que la instalación empezaron a tener uso a principios del pasado año. También se apunta a la falta de «pantallas de resguardo en las luminarias», que puede provocar «incendios por posibles focos de ignición y contactos eléctricos». El escrito sobre riesgos laborales señala la «presencia de roedores, aves, insectos en las zonas ajardinadas» situadas en el entorno del edificio, lo que supone un riesgo por posible «enfermedad profesional infecciosa o parasitaria». Por otro lado, el informe se centra en la «carencia de trabajo» en alguno de los puestos del Observatorio de Medio Ambiente, cuya actividad arrancó durante la etapa de Guanyar al frente de la concejalía.
«Irregularidades de origen»
Por otro lado, el PSOE ha registrado un escrito dirigido al gobierno municipal del PP en el que reclama ahora el expediente completo de las obras del Observatorio de Medio Ambiente, que empezaron en 2012 y que no concluyeron hasta cinco años después, lo que supuso que el Ayuntamiento tuviera que devolver unos 65.000 euros de fondos europeos de una instalación cofinanciada con el programa Feder. En agosto de 2017, el tripartito reconoció que una sentencia judicial además obligaba al Ayuntamiento a pagar unos 80.000 euros de indemnización a una empresa con la que el anterior equipo de gobierno, del PP, rompió el contrato por supuesto «incumplimiento» de los plazos acordados. En la licitación, el plazo de ejecución de las obras era de un año. El concejal socialista Fernando Marcos anunció ayer que han solicitado ahora el expediente con la intención de denunciar las obras ante la Fiscalía por supuestas «irregularidades desde el origen». Marcos, que fue responsable de la Concejalía de Medio Ambiente entre noviembre de 2017 y hasta el pasado mes de abril tras el cambio de gobierno, asegura que desde su llegada al área tras la ruptura del tripartito «pidió la documentación para ver qué había ocurrido». Sin embargo, prosiguió ayer, «había una opacidad en torno al asunto fuera de lo normal».
