La Conselleria de Educación ha apurado tanto los plazos para ratificar el plurilingüismo que se impartirá en los colegios el curso próximo en Infantil y dos primeros cursos de Primaria, que los centros escolares cuentan con un margen escaso para informar a las familias, tal y como es preceptivo, antes de que empiece el proceso de matrícula el jueves próximo.
El departamento que dirige el conseller, Vicent Marzà, se comprometió a autorizar la enseñanza en lenguas para el curso que viene antes del inicio de la admisión de alumnos, pero ha dejado apenas dos días para que los colegios puedan convocar la semana que viene a las familias, antes de elegir centro para los niños de 3 años.
Ayer empezaron a llegar a los colegios las actas de Educación con los porcentajes de la enseñanza en lenguas que recibirán los niños, tras acordarlo previamente los consejos escolares.
Según señalan a este diario desde los propios colegios, los directores deben convocar a las familias con al menos 48 horas de antelación para cualquier reunión informativa, y se han visto obligados a programar dichas convocatorias para la semana que viene, el lunes o el martes, prácticamente en paralelo al inicio del propio proceso de matrícula.
Reticencias
Los directores aclaran que para los padres que matriculan a sus hijos de 3 años por vez primera, la información sobre la enseñanza en lenguas de cada centro es solo un dato más entre el conjunto de todo el plan de actividades programado y por el que se interesan las familias para elegir colegio.
Sin embargo, la situación se torna delicada entre las familias con hijos ya matriculados en centros de doble línea, con enseñanza diferenciada en valenciano o en castellano, porque a partir del curso próximo se unifica la misma enseñanza para todos estos alumnos hasta segundo de Primaria.
En los centros escolares consultados coinciden en considerar esta información como «extremadamente sensible» para las familias, por lo que preferían hacerlo pausadamente y sin prisas.
En unos casos se ha convocado a las familias y en otros señalan que se ven obligados a informar únicamente por escrito, mediante circulares a cada uno de los padres y ubicando carteles en espacios visibles del centro.
Los colegios tienen que hacer saber a padres cuyos hijos estaban matriculados en la línea en castellano que, en general, seguirán dando la Lengua y las Matemáticas en castellano, pero que el resto de las asignaturas las recibirán en Valenciano a excepción de dos o tres en inglés, según el grado de plurilingüismo al que se ha acogido cada centro sobre el margen que da la Ley del 15% al 25%.
Las asignaturas escogidas por la mayoría de los centros escolares para cumplir con el 15% mínimo de la enseñanza en inglés que estipula la Ley de Plurilingüismo, e incluso poder superarlo en ocasiones, son las de Educación Física, Religión o Valores Éticos, y Música.
Los directores no detectan mayor disconformidad entre familias cuyos hijos van a perder alguna asignatura en valenciano a favor del castellano, para poder cumplir el 25% mínimo de la enseñanza que estipula la ley en cada una de las lenguas oficiales.
Sin embargo, entre los que aprendían en castellano y recibirán alguna asignatura más en valenciano, perciben una mayor susceptibilidad. Los responsables de los centros apuntan hacia la imprescindible colaboración de las familias para el éxito escolar de sus hijos y valoran informarles debidamente.
