? Miguel Ángel Candela, el extrabajador de la UTE de la limpieza que pedía la readmisión en la empresa, abandonó ayer la huelga de hambre que inició hace 43 días. «Dejo la huelga de hambre por motivos de salud, tengo una analítica que me ha llevado a pensarlo, estaba bajo mínimos», señaló ayer Miguel Ángel, quien inició el ayuno voluntario para exigir ser readmitido por la concesionaria, que optó por indemnizarle con 17.000 euros, según recogía una sentencia, en lugar de readmitirle en la empresa.