La diputada de Compromís en Las Cortes Valencianes Cristina Rodríguez ha anunciado que su grupo presentará una enmienda en el Senado para que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) destinen 13,5 millones de euros a la construcción de las naves cerradas del Puerto de Alicante. El proyecto aprobado por el Consejo de Administración del Puerto está ahora a la espera de que el presidente del Puerto, Juan Antonio Gisbert, encuentre inversores privados ya que Puertos del Estado no aportará fondos y sólo cede el muelle, tal como sucedió en Santander.

"Exigimos al Gobierno central que cumpla con el mandato unánime de todos los grupos políticos del parlamento valenciano, con los vecindarios afectados y con la mejora de la productividad del Puerto de Alicante", ha manifestado la parlamentaria alicantina.

Para Rodríguez, la publicación esta semana del anuncio de licitación en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) de la construcción y explotación de una terminal de graneles sólidos en el puerto de Alicante, "es una muestra de que estamos avanzando en la solución para un problema que lleva décadas enquistado".

Por ello, la diputada de Compromís ha pedido también al presidente de la Autoridad Portuaria, Juan Antonio Gisbert, que "trabaje con determinación y responsabilidad para atraer los inversores necesarios y que el concurso público no quede desierto".

"Es muy positivo que la Unión Europea dé luz verde a la construcción de las naves cerradas, la pelota está ahora en el tejado del Gobierno de Rajoy, que debe financiar de forma responsable una infraestructura clave para la mejora de la calidad del aire y la salud de los alicantinos, así como para la competitividad del Puerto de Alicante. Las naves son una oportunidad tanto para el sector del mármol como para otros sectores industriales", señala la diputada eldense en un comunicado.

"El cierre en naves supone una buena oportunidad económica", además, Cristina Rodríguez ha recordado que, "es responsabilidad de la Autoridad Portuaria y del Gobierno de Mariano Rajoy garantizar esas naves y también propiciar la inversión privada".

Naves cerradas

El consejo de administración del Puerto de Alicante respaldó a finales de enero la propuesta del presidente, Juan Antonio Gisbert, para la construcción de una terminal con naves cerradas para mover los graneles en el Puerto, tal como exige el Consell, los vecinos afectados y el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.. Con todo, el proceso burocrático llevará el comienzo de las obras al mes de noviembre. Mientras, el Puerto garantiza que no habrá problemas en el movimiento de esta carga.

Además, en el consejo se hicieron públicos los datos económicos negativos que supuso el cierre de los muelles graneleros la semana de enero que la que el Puerto estuvo cerrado. Las pérdidas superaron el millón de euros sumando todos los colectivos afectados. Según los técnicos, el cierre total de las instalaciones supondría unas pérdida anuales de 40 millones de euros y 500 empleos directos en Alicante. Datos que ratifican que la actividad granelera del Puerto es clave para la economía de la ciudad.

Gisbert se comprometió en el consejo a mantener las medidas de prevención para minimizar el impacto ambiental y para la salud que produce la emisión a la atmósfera de las partículas de ciertos graneles como el cemento o el clíncker. Es más, durante el consejo se mostró un informe fechado el pasado jueves, sin actividad granelera en los muelles, en el que los medidores sólo alertaron de un deterioro en la calidad del aire a las 9 de la mañana y a las 22 horas, achacable al aumento del tráfico rodado.