El entorno del polígono industrial Llano del Espartal, junto al Cementerio de Alicante, vuelve a estar lleno de basura apenas cuatro meses después de que operarios de la contrata de limpieza retirasen de una explanada y de varias carreteras del polígono más de 360 toneladas de residuos acumulados durante años. Durante nueve días de enero cuatro trabajadores con dos camiones y una pala de la contrata, UTE Alicante, se emplearon a fondo hasta que la zona se quedó limpia como la patena, pero no ha tardado en recuperar la misma imagen incívica.

Porque hay de todo tirado por el suelo, en un espacio a caballo entre una escombrera y un estercolero que atrae incluso a las aves. Decenas de sacos de escombros, montones de prendas de ropa, zapatos, discos, maderas, cuadros, monitores de ordenadores antiguos, restos de sanitarios -desde lavabos a platos de ducha-, sofás, colchones, muebles antiguos y hasta cajones de los que se utilizan para trasladar obras de arte en barcos. Así como cristales, plásticos, circuitos de aparatos electrónicos, parachoques de coches, libros y una bandera española. Hay basura también en una nave abandonada próxima, donde se aprecian las huellas de un fuego. El anterior concejal de Limpieza, Fernando Marcos, habló en enero, cuando se hizo la actuación, de incivismo y pidió responsabilidad a los ciudadanos que van allí a tirar basura. Su llamamiento fue infructuoso. Tampoco hay carteles que prohíban arrojar escombros bajo multa.

Aquella intervención se realizó en paralelo a la captura de cerdos vietnamitas con trampas que apresaron a una veintena de ejemplares, que fueron trasladados al albergue de Bacarot. Sin embargo, el Ayuntamiento no ha logrado erradicar el problema pues estos animales siguen campando a sus anchas por la zona, como se podía apreciar ayer, con varios de ellos sueltos cruzando la calle. Algunos llegaron a meterse, meses atrás, en el camposanto y a escarbar entre las tumbas, requiriendo la presencia policial.

El grupo municipal de Ciudadanos (Cs) alerta de nuevo de que el entorno del Cementerio se está convirtiendo en un estercolero «en el que la inmundicia campa a sus anchas. Es una falta de respeto a los vecinos del barrio y a los que han perdido un ser querido», que pasan por las proximidades para acudir al cementerio. Así lo afirma el edil de Cs Juan Francisco Escudero, que inspeccionó la zona tras recibir varias cartas de queja. «Todo el área se ha convertido en una cochambre, problema que se agrava por la suciedad en el polígono industrial contiguo, donde harían falta al menos diez camiones de recogida de basura para adecentarlo». Ciudadanos ha pedido por escrito en el registro del Ayuntamiento un plan de choque urgente «en el que se incluya una intervención social para proporcionar soluciones de realojo para los chabolistas instalados en la zona». Y reclama al PP, «que criticó con dureza esta situación» que tome cartas en el asunto para zanjar una problemática que afecta a Limpieza, Protección Animal y Acción Social.

Sobre los cerdos vietnamitas, Cs cree que el problema va a más. «Suponen un riesgo importante para la seguridad vial en la carretera de acceso al camposanto», algo que corroboran vecinos y trabajadores del polígono industrial. «Que los anteriores equipos de Gobierno no hicieran nada, no es pretexto para que el PP se duerma en los laureles en un área que está derivando en un foco de marginalidad», dice el edil.