Cerca de 2.000 colillas, otros tantos preservativos, alguna jeringuilla, escombros de obras, botellas de cristal, utensilios de pesca, pañales, compresas e incluso ropa y alguna colchoneta es el balance de la actividad llevada a cabo por los estudiantes del Instituto Cabo de la Huerta en el marco e su colaboración con la Asociación Ambiente Europeo por un entorno más saludable.

A lo largo de tres días de recogida de residuos en 1.300 kilómetros de playas en La Almadraba, La Calita y Cala Cantalar, los más de 200 estudiantes de primero y tercero de Secundaria han reunido 130 kilos de basura en 83 bolsas «hasta arriba», como concreta una de las profesoras que coordina la actividad, Inés García Ortiz.

Se trata de un proyecto de sostenibilidad y de concienciación sobre el medio ambiente, que se ha llevado a la práctica tras abordarlo en diversas asignaturas de Ciencias, Geografía e Historia y Eduación Física para dar continuidad al proyecto Erasmus Humrev que ha trabajado el centro los últimos años sobre los derechos humanos, con otros cuatro países y la Universidad de Alicante.

Los profesores implicados avanzan su intención de programar esta misma actividad de una forma planificada y trimestral desde el próximo curso «para que no quede en un día de recogida de basura».

Quejas

A algunos de los alumnos que se quejaron por tener que recoger los residuos de los demás, desde el centro explican que se les ha hecho ver que les ha servido para «tomar conciencia fe que el problemaq no es lo que recoges puntualmente durante esta actividad, sino que se haga después en el día a día en la playa y que si en el futuro tienen un cargo de responsabilidad actúen también de otra manera», apunta Inés García.

La actividad ha contado con la colaboración de Ayuntamiento que ha cedido operarios de limpieza para orientar a los alumnos. Les han facilitado tanto los guantes para manipular objetos cortantes sin peligro, como el itinerario de zonas de recogida.

El profesorado también ha aprovechado el proyecto Tei, de tutoría entre iguales, para favorecer el trabajo de alumnos más pequeños con los mayores y propiciar una colaboración que también contribuye a evitar posibles conflictos. Un trabajo serio que consta en numerosas actas rellenadas por los propios estudiantes.