n La Generalitat Valenciana ha consignado en los presupuestos de la Conselleria de Sanidad de este año un total de 10 millones de euros para las ayudas al copago para personas desempleadas. Así lo anunció ayer el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien ha asegurado que gracias a esta medida la Comunidad «da un paso más hacia una sociedad inclusiva y decente, una sociedad en la que no se deja a nadie al margen».

Puig explicó esta medida, que entrará en vigor a partir del 1 de mayo, junto a la consellera de Sanidad, Carmen Montón, y detalló que permitirá que las personas que perciban prestación o subsidio por desempleo o que hayan agotado dicha prestación, y tengan rentas inferiores a 18.000 euros, tengan garantizada la gratuidad de sus medicamentos. En concreto, un total de 220.957 personas tendrán acceso a estas ayudas. La situación económica interfiere en el inicio de tratamientos farmacológicos prescritos por facultativos o provoca el abandono de los mismos y, en este sentido, el presidente afirmó que «es muy duro que haya personas que no puedan atender a las necesidades básicas y tengan que renunciar al cumplimiento de un tratamiento».

Respecto a las ayudas al copago farmacéutico, cabe señalar que en 2017 se han podido beneficiar de las mismas 1.258.151 personas: 116.056 personas con diversidad funcional, 792.0896 pensionistas con renta baja y 349.199 menores.

Por su parte, Carmen Montón quiso señalar que «estamos garantizando la equidad en los tratamientos farmacológicos en la Comunidad. Con estas ayudas hemos conseguido que se reduzca el abandono en un 39%». «Hemos querido que el colectivo de desempleados fuera el siguiente beneficiado ya que estas ayudas ya las reciben pensionistas, personas con diversidad funcional y menores asociados a tarjeta SIP, todos con rentas inferiores a 18.000 euros. Terminaremos 2018 con casi dos millones de valencianos y valencianas que estarán recibiendo ayudas al copago», afirmó.