La semana pasada los empresarios iniciaron el segundo año de movilizaciones para exigir celeridad en las obras del Corredor Mediterráneo
Este es uno de los tramos más complejos del Corredor Mediterráneo desde La Encina hasta l'Alcúdia. Hemos sacado ya una primera inversión de 19 millones para liberar la plataforma por la que circulan ahora los trenes. Antes de verano nos comprometemos a sacar a licitación 250 millones de obras de señalización y seguridad con los 20 años de su mantenimiento.
Túnel pasante de València. Este año se han presupuestado 347.433 euros de una obra que llegó a tener proyecto y cuesta sobre los 880 millones de euros. 24 meses de plazo y dos años más sin excavar el túnel.¿No hay forma de adelantar la obra?
Este es un ejemplo más de que se falta a la realidad. El túnel y todo lo relacionado con el parque central y la integración del ferrocarril en València estaba prácticamente en liquidación. Una situación sin salida que el Gobierno ha desbloqueado y ha puesto en marcha para que sea una realidad lo antes posible. El túnel no tiene declaración de impacto ambiental vigente y la necesita. El que pretenda trasladar que se podría ejecutar un proyecto que no tiene declaración de impacto es que está mintiendo. Nuestro compromiso era hacer un estudio informativo, y, además, vamos a asumir el cien por cien del coste, que son mil millones de euros. El estudio hay que someterlo a la nueva ley ferroviaria y la ambiental. Hemos iniciado los trámites y consignado una partida presupuestaria de un millón de euros que garantiza la elaboración del estudio informativo. Que ahora el alcalde de València ponga el grito en el cielo como le he escuchado en relación a esa consignación demuestra cómo se puede retorcer la realidad.
¿Se le nota crispado?
El alcalde de València sabe perfectamente que nuestro compromiso es hacer el estudio informativo y que si tuviera que hacerlo él tendría que seguir los mismos pasos y con los mismos tiempos. Y no se podría saltar ninguno de ellos porque estaría cometiendo una ilegalidad, y no podría consignar dinero para una partida salvo que estuviera pintando cifras para engañar. Nosotros somos los que estamos sacando adelante la operación de València con enormes dificultades y favoreciendo a la administración local y a la autonómica para que puedan ajustar sus compromisos de gasto a sus disponibilidades. Eso lo hace el Gobierno de España aunque no lo cuenten. La obra lleva mucho tiempo y requiere sus plazos.
