Este fin de semana lucirá el sol en la provincia y las temperaturas máximas llegarán a los 23 grados. Finalmente, la borrasca que iba a barrer España este fin de semana no va a tener la intensidad inicialmente prevista ya prácticamente ha desaparecido el riesgo de lluvias en Alicante, según la previsión actualizada del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. Continúa por tanto el anticiclón y el tiempo primaveral que ya parece se va a instalar definitivamente en la provincia, que comience a a acercarse a los meses que anticipan el verano.

Mientras, siguen llegando buenas noticias de la cabecera del Tajo, donde el deshielo ha hecho que los embalses de Entrepeñas y Buendía superen ya la barrera de los 600 hm³ almacenados, doscientos por encima de la "línea roja" que cierra el trasvase.

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El invierno que fue climáticamente normal, tanto en precipitación como en temperatura, aunque con dos partes claramente diferenciadas. La primera parte, hasta el 25 de enero, fue muy cálida y muy seca, y la segunda parte, desde final de enero y todo febrero, muy fría y húmeda. Respecto al actual año hidrológico, desde el 1 de octubre los 3 primeros meses, octubre, noviembre y diciembre de 2017, resultaron muy secos, mientras que los dos meses siguientes, enero y febrero de 2018, fueron húmedos.

A pesar de las precipitaciones del primer trimestre de 2018, el actual año hidrológico sigue siendo uno de los más secos de la serie en la Comunidad Valenciana, en concreto el sexto más seco desde 1951, pero con el aporte de lluvia de los últimos meses, no sólo se ha reducido el gran déficit de precipitación que se había acumulado hasta mitad de enero, sino que la humedad del suelo ha aumentado de forma significativa. No obstante, es clave que llegue el agua del Tajo, más barata además que la desalinizada.