Tras confirmase a primera hora de ayer la dimisión de Gabriel Echávarri como alcalde de Alicante, la socialista Eva Montesinos continuará hoy buscando el voto que le falta para asegurarse su investidura en un pleno previsto para dentro de un máximo de diez días.

La «delfín» de Echávarri prevé cerrar esta tarde la ronda de negociaciones con la oposición municipal, con reuniones por separado con Ciudadanos y los dos concejales tránsfugas.

El ex de Ciudadanos, Fernando Sepulcre, se posiciona como la opción más real para que el gobierno municipal siga en manos de la izquierda.

El propio Sepulcre, que en la Diputación sostiene al ejecutivo del popular César Sánchez, aseguró ayer que «lo coherente es apoyar lo que eligieron los ciudadanos en 2015», en alusión directa al resultado que salió de las urnas, que permitió a la izquierda recuperar el gobierno de Alicante tras veinte años en manos del PP.

Sepulcre, sin ir más lejos, permitió recientemente al PSOE sacar adelante los presupuestos municipales para este año, al sumarse al voto afirmativo dado por los exsocios del tripartito, Guanyar y Compromís. «No puedo perder la credibilidad. Creo que Montesinos es lo menos malo», continuó Sepulcre a preguntas de este diario ante su reunión de hoy con los socialistas.

(ACTUALIZACIÓN: Al día siguiente de realizar estas declaraciones, Sepulcre cambió de discurso y se postuló a sí mismo como alcalde de un gobierno de concentración)

Ante el pleno de investidura que, como muy tarde, se celebrará el sábado 21 de abril, Montesinos cuenta con el apoyo de las formaciones lideradas por Pavon (un voto que debe certificar una asamblea de la marca blanca de EU) y Bellido, así que le falta un voto para sumar los 15 necesarios.

Todo apunta, según palabras de Sepulcre, que el ex de Cs puede resultar clave para que el gobierno de la ciudad continúe dirigido por la izquierda, aunque sin conocer aún los actores de ese posible ejecutivo liderado por Montesinos.

Belmonte, que en 2016 fue expulsada de Guanyar y del tripartitopor conceder contratos menores a una empresa de su entorno, también se verá hoy las caras con la candidata socialista para relevar a Echávarri en la Alcaldía, que a su vez estará acompañada por dirigentes del PSPV, al igual que sucedió el pasado jueves en las reuniones con Guanyar y Compromís.

«Voy abierta a escuchar, me gustaría saber qué plan tiene el PSOE para el año que queda de mandato», afirmó ayer Belmonte, quien insistió en poner sobre la mesa la petición de sueldo y derechos políticos, que se incluiría en una reforma del Reglamento Orgánico del Pleno (ROP) que se tendrá que votar por la corporación.

Antes de las reuniones de la tarde con los tránsfugas, la socialista Montesinos se verá hoy con Ciudadanos (12 horas), el grupo municipal al que la izquierda insta a apoyar la próxima investidura. Sin embargo, la formación de Albert Rivera no tiene intención alguna de avalar la continuidad de la izquierda al frente del Ayuntamiento, pese a que la otra opción sería el regreso a la Alcaldía del PP, su rival directo en las urnas.

«El PSOE ha desperdiciado por completo el aval que le dimos en 2015, sería de ingenuos embarcarnos de nuevo en el mismo fango», apuntó ayer la portavoz de Cs, Yaneth Giraldo, en alusión a la supuesta financiación ilegal del PSPV en las campañas electorales del año 2007.

La rueda de prensa de ayer de Montesinos

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Primera decisión

Poco después de que Echávarri, a través de un tercero, presentara a primera hora de ayer su renuncia como regidor, cumpliendo lo que anunció el 23 de marzo en la sede del PSPV de Blanqueries, la alcaldesa en funciones, Eva Montesinos, empezó a romper con el pasado, destituyendo a los dos asesores de Echávarri que también están procesados en el caso del presunto fraccionamiento de contratos de Comercio.

Así, el jefe de Gabinete de Alcaldía, Lalo Díez, y el asesor de Comercio (que fue apartado de la concejalía tras la llegada de Gloria Vara al área y recolocado en Alcaldía), Pedro de Gea, dejaron ayer de ser personal de confianza del Ayuntamiento, según confirmaron desde Recursos Humanos.

Díez, que recientemente también dejó de ser el portavoz de la Ejecutiva local del PSOE, llevaba días anunciando a su entorno que tenía la intención de dejar el cargo cuando Echávarri dimitiera. Finalmente, Montesinos decidió ayer cesar a dos de las personas de confianza de Echávarri, que ayer solo rompió el silencio con dos mensajes en Twitter.

El resto de asesores del Ayuntamiento, tanto del ejecutivo como de la oposición, continuarán de manera provisional hasta el pleno de investidura, que se celebrará como máximo el 21 de abril, ya que el PSOE decidió acortar plazos al convocar para hoy el pleno en el que se dará cuenta de la dimisión de Echávarri.

Ésta es, según fuentes de Recursos Humanos, la interpretación de la ley («el cese tendrá lugar cuando se produzca el de la autoridad a la que se preste la función de confianza») que realiza la Secretaría del Ayuntamiento.

Echávarri, que ayer cerró su etapa como máximo responsable municipal, se convierte en el tercer alcalde de Alicante que dimite en la última década, tras los populares Díaz Alperi y Castedo. El socialista está pendiente de dos juicios, por el supuesto fraccionamiento y por el despido de una trabajadora.