La Agencia Valenciana de Turismo tiene previsto invertir este año un total de dos millones de euros para mejorar la infraestructura lúdica de las playas de la Comunidad Valenciana y dotarlas de un elemento diferenciador con otras comunidades de cara a la captación de turistas. En concreto, aumentará el número de casetas de baño, la zonas para el baño para personas de movilidad reducida y, como novedad, se van a instalar seis palmeras tecnológicas, dos en Santa Pola y Torrevieja, en concreto en sus paseos marítimos. También habrá en Peñíscola, Benicàssim, Cullera y Gandia.

Estos dispositivos portátiles tienen una doble función. Por una parte, sirven para permitir la carga de los dispositivos móviles mediante la conversión de energía solar, y por otra, como herramienta de marketing e imagen y de diferenciación del destino turístico, al situarse en lugares con gran visibilidad la imagen icónica de la Comunidad Valenciana.

El objetivo de esta inversión es mantener la excelencia y la calidad de las playas con nuevos servicios turísticos, además de reforzar la reparación y el mantenimiento de las infraestructuras higiénicas y lúdicas. La finalidad es que los turistas dispongan de los mejores servicios este verano, pero también fuera de la temporada estival. Se instalarán 100 casetas de baño-vestidores, de las que 32 estarán en Alicante.