Los alumnos de Maristas han vuelto a sacar a hombros el paso de la Hermandad Stabat Mater ante una multitud que esperaba en la plaza de la Montañeta a ver salir el grupo escultórico del artista alicantino Remigio Soler desde Nuestra Señora de Gracia.

La hermandad fue fundada en 1992 y lleva el segundo trono más grande de la Semana Santa alicantina, tras la Santa Cena.

Además de los costaleros, alumnos, exalumnos y familiares participan en todos los cuerpos de la procesión, desde los costaleros a damas de mantilla, hermanos de fila, jóvenes y niños, que desfilan desde los cinco años en una cuadrilla especial infantil con más de 100 participantes.

El paso consta de cinco imágenes, Jesús, María, María Magdalena, San Juan y un sayón ofreciendo de beber al crucificado una esponja empapada en vinagre. Según ha anunciado su hermano mayor, Stabat Mater tendrá su segundo trono, una Virgen, en 2020.

Como el año pasado, la hermandad tenía previsto pasar por la calle Mayor, con la dificultad que ello conlleva por la estrechez de la calle y las dimensiones del trono, que también hace que los giros en calles como Ángel Lozano y Teatro sean de especial interés para el público