Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento criticaron ayer la decisión de Echávarri de prolongar la situación de inestabilidad en el gobierno municipal al tiempo que consideraron que esta «dimisión en diferido», no hace sino ralentizar la posibilidad de alcanzar un acuerdo para nombrar un nuevo alcalde. En este sentido, tanto Ciudadanos como los tránsfugas dejaron claro ayer que no van a sentarse a negociar hasta que la dimisión sea efectiva. No fueron los únicos que aseguran que no se fían de que Echávarri vaya a mantener su palabra de marcharse. También en las filas de la izquierda se cuestionó la fiabilidad del todavía alcalde.

Así, el portavoz municipal de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, indicó que «hasta que no dimita, no podemos sentarnos a negociar en serio. Por ejemplo, Ciudadanos ya ha dicho que no va a hablar hasta que se haga oficial la dimisión. Esto es seguir alargando una agonía que nadie entiende».

Pavón recordó que «lo dijimos hace ya varios meses: al final Echávarri dimitirá, como en su momento ya dijimos que haría Castedo y finalmente dimitió», para añadir que «su obstinación en no dimitir ha supuesto la ruptura del gobierno plural y la parálisis y desgobierno de la ciudad durante varios meses. Podía habérselo ahorrado al Ayuntamiento y a la ciudad dimitiendo cuando recibió su primera imputación judicial el pasado mes de septiembre». El portavoz de Guanyar manifestó que «nos parece una nueva burla más del alcalde esa última condición de que su dimisión tenga efectos el próximo 9 de abril. Debe dimitir de inmediato hoy mismo (por ayer) de forma irrevocable, sin ningún tipo de condiciones. Echávarri no debería presidir el pleno del Jueves Santo, es un cadáver político que hoy ha enterrado su partido, el PSPV. Que no se resista más a dejar una Alcaldía en la que se ha mostrado incapaz de liderar un gobierno del cambio para la ciudad y que ha vuelto a vincular con los escándalos judiciales».

Bloque de izquierdas

Con respecto a la situación que se plantea a partir de la dimisión, Pavón señaló que «hay que investir un nuevo alcalde o alcaldesa, algo que desligamos totalmente de entrar o no en el gobierno municipal. Eso llegará después», y reiteró que «nuestro objetivo es un alcalde del bloque de izquierdas». Con respecto a sus conocidos desencuentros con la número dos del grupo socialista y previsible aspirante a la Alcaldía, Eva Montesinos -quien sustituyó a Pavón al frente de la Concejalía de Urbanismo cuando se rompió el tripartito-, Pavón indicó ayer que «no hay problema en apoyar a alguien del PSOE incluida Eva Montesinos. No es la persona que más nos gusta pero, si es la candidata que propone el PSOE, la apoyaremos para la Alcaldía».

Para el portavoz de Guanyar, en el proceso que ahora se abre es el PSOE el que debe llevar la iniciativa. «Entendemos que el PSOE es el que tiene que dar el primer paso en el inicio de las negociaciones y es el que tiene que poner toda la carne en el asador y propiciar las negociaciones. Son ellos los que nos tienen que llamar».

A juicio de Pavón, en la futura investidura juega un papel fundamental Ciudadanos, ya que «en sus manos estará que haya un alcalde de izquierdas o uno del PP». De no contar con sus votos, el bloque de izquierdas necesitaría el apoyo de, al menos, uno de los tránsfugas en la investidura «pero espero que no haga falta recurrir a ellos» señaló Pavón quien manifestó que «nosotros en cualquier caso pondremos condiciones para hacer cosas en la ciudad para lo que queda de legislatura».

También criticó ayer la postura de Echávarri el portavoz municipal de Compromís, Natxo Bellido, aunque se congratuló de que el momento de la dimisión esté cerca. «El señor Echávarri ha dicho que se va. Creemos que esta decisión llega tarde pero parece que se va. Aunque sigue alargando los plazos esta noticia hace tiempo que la ciudad la esperaba», manifestó Bellido, quien añadió que «debe ser inmediato que se aparte de sus funciones. No podemos alargar más el tiempo de inestabilidad en Alicante».

Compromís ha convocado su ejecutiva el lunes por la tarde para hacer una valoración política de la situación del Ayuntamiento y la ciudad, aunque Bellido ya lleva adelantando en los últimos días la postura de su grupo de cara a la futura Alcaldía. Así, reiteró ayer que los tres concejales de su grupo «estaremos al lado de buscar una solución a una nueva investidura para que un candidato o candidata progresista, que puede ser Eva Montesinos, sea alcaldesa y ahí Compromís levantará la mano para que el PP, que no es solución a nada en esta ciudad, sino que es el problema, no gobierne».

Natxo Bellido mostró su esperanza en que «se abra un tiempo de solución para esta ciudad. Emplazamos a Guanyar, a Ciudadanos y a los no adscritos a sumarse a este bando de buscar soluciones por la gobernabilidad, la estabilidad y la normalidad institucional que necesitan los alicantinos y alicantinas».

Dudas

Por su parte, la tránsfuga ex de Guanyar Nerea Belmonte, celebró ayer el anuncio de dimisión del alcalde. «Celebro que el alcalde haya por fin decidido poner la ciudad por delante y que haya presentado su dimisión. Es un primer paso pero hay que verlo». La concejala expresó sus dudas sobre el compromiso de marcha del alcalde: «Yo, hoy por hoy, tengo que estar segura de que el alcalde se va a ir. Cuando Echávarri haya dimitido nos sentamos a hablar, pero hasta que no se vaya, nada».

Belmonte, quien reiteró ayer que está «dispuesta a escuchar a todo el mundo pero es más fácil escuchar a unos que a otros» en referencia a su mayor afinidad ideológica con la izquierda, afirmó, con respecto a sus conocidos desencuentros con su excompañero de grupo Miguel Ángel Pavón, que «la izquierda es mucho más grande que Pavón». La concejala reiteró, como viene diciendo en los últimos días, que antes de apoyar a nadie «habrá que tener una hoja de ruta para lo que queda de mandato» y eludió pronunciarse sobre si condicionará su apoyo a cuestiones personales como volver a cobrar en el Ayuntamiento por su trabajo, ya que es la única edil que no cobra.