Con casi todos los focos apuntando al posible relevo de Gabriel Echávarri en la Alcaldía de Alicante, pocos miran hacia la asamblea de la agrupación socialista de la capital convocada para mañana sábado en la que se sustanciará la marcha de Echávarri como secretario general. Los militantes citados a una asamblea maratoniana en la Universidad de Alicante -más de ocho horas de duración según la convocatoria- tendrán que decidir entre el oficialista Miguel Millana, exconseller con Joan Lerma hace 35 años, candidato impulsado por el exsenador Ángel Franco avalado por el propio Gabriel Echávarri y que ayer fue visto en las inmediaciones del Ayuntamiento de Alicante; y el «sanchista» José Miguel González Moreno, antiguo asesor municipal y en las Cortes Valencianas que parte, a priori, con muy pocas opciones de victoria. Sin embargo, en estos momentos, sobre la asamblea de mañana planean las denuncias de militantes que cuestionan su legalidad.

En Ferraz, con destino a la ejecutiva y a la comisión de ética, se han recibido, de hecho, una treintena de quejas de afiliados alicantinos sobre la limpieza del proceso interno. Revisada toda la documentación, efectivamente, la dirección federal del PSOE ha detectado una serie de irregularidades que se deben subsanar para garantizar la limpieza de la asamblea. La cúpula socialista en Madrid, según fuentes socialists, ya ha remitido una respuesta a la secretaría de Organización del PSPV, encargada de verificar el cumplimiento y de la contestación, con copia a esa misma área de la ejecutiva provincial y de la dirección local. En síntesis, son tres los aspectos que están en cuestión. La primera cuestión, como es habitual, está vinculada al control del censo de afiliados, formado por más de un millar de militantes pero que no estaría expuesto para verificar el cuerpo electoral que tiene derecho a participar exactamente en el proceso interno del partido en Alicante.

La segunda irregularidad tiene que ver con la obligación de informar a la militancia de la existencia de dos candidaturas a la secretaría general. Es decir, que los militantes conozcan las alternativas que tienen encima de la mesa para la asamblea. Y tercero la posibilidad de que los afiliados tengan la posibilidad de acreditarse para votar durante toda la jornada, no sólo en un periodo limitado de tiempo a voluntad de los que controlan el cónclave, siempre que cada militante dispuesto a participar se identifique con DNI. Ferraz tiene que recibir antes de la asamblea la respuesta de que esa situación se ha solucionado para validarla.

La convocatoria, en principio, arrancará mañana a las doce del mediodía en la Universidad de Alicante con la constitución de la mesa y la ratificación del orden del día. Entre las doce y diez y las doce y media está previsto la lectura de actas, el balance de la afiliación, la lectura de circulares y el repaso a los acuerdos de los órganos nacionales del PSPV y federales del PSOE. Entre las doce y media y las seis de la tarde tendrá lugar el debate del informe de gestión de la ejecutiva saliente que encabeza el todavía alcalde Gabriel Echávarri. Finalmente, entre las seis de la tarde y las ocho y media se abrirán las urnas para que los militantes puedan elegir entre las dos candidaturas presentadas. Podrán acreditarse todos los afiliados a lo largo de la jornada, tal y como ya ha ratificado la dirección federal del PSOE.