El presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV, Ximo Puig, convocará para mañana al secretariado de su ejecutiva -el núcleo duro de la cúpula socialista- para oficializar un acuerdo político de todo el partido pidiendo la dimisión del alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, en la línea de los movimientos que se vienen produciendo en los últimos días. Los socialistas valencianos ya no asumen las condiciones del primer edil de renunciar al puesto sólo cuando hubiera votos suficientes para retener el control del Ayuntamiento de Alicante. Quieren que se marche y poner al resto de grupos ante la tesitura de "regalarle" la alcaldía al PP.

El jefe del Consell quiere escuchar a todos los miembros de la dirección socialista y, sobre todo, al secretario de Organización, José Muñoz, que es la persona que ha abordado la cuestión sobre el terreno. La negativa de Ciudadanos a sumarse al acuerdo aboca a entenderse con los tránsfugas pero ese pacto no está cerrado. La dirección del PSPV quiere trasladar la imagen de que, al menos, mueve ficha para intentar desbloquear el cambio de alcalde. La reunión de la ejecutiva de los socialistas valencianos se producirá apenas 24 horas antes de la asamblea que debe renovar la dirección de la agrupación socialista de Alicante, en la que Echávarri será relevado.

En público, sin embargo, evitó todavía hacer un pronunciamento oficial sobre la dimisión de Echávarri. Por dos veces, el presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV, Ximo Puig, se abstuvo esta mañana de confirmar si el partido va a exigir la dimisión al alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, por el doble procesamiento judicial del que es objeto pero sí que ha manifestado que el regidor tendrá que asumir responsabilidades políticas.

Puig, que ha asistido en Alicante a la inauguración de los actos del Día Mundial del Agua, no ha tenido que verse las caras con Echávarri, quien no ha acudido a un acto que se celebraba en la Sede Universitaria con Puig pese a que estaba previsto. Posteriormente, el presidente autonómico se ha dirigido a otro acto en la sede del Consell, donde ha respondido a diversas preguntas sobre la situación de Echávarri en la Alcaldía, doblemente procesado. Puig ha dicho que "hay que buscar una solución en el menor tiempo posible y ya queda poco tiempo. Estamos en disposición de buscar la mejor de las soluciones para dotar de estabilidad al gobierno de Alicante".

Asegura que con este fin la Generalitat está haciendo un esfuerzo enorme en Alicante para que se desatasque una crisis "que efectivamente tiene que obedecer a esa mirada de defensa del interés general. Sabemos que no hay un caso de corrupción pero sí unas responsabilidades políticas que se deben asumir" para que se mantenga un gobierno de progreso en el Ayuntamiento siguiendo el mandato de las urnas en 2015 pero "queda poco tiempo", ha insistido.

"Estamos en disposición de buscar una solución porque se han hecho políticas positivas tapadas por esta crisis. Nunca quiero hablar en términos partidarios en mi condición de presidente pero como hoy es inevitable les digo que en las proximas horas convocaremos una reunión del Secretariado del PSPV para tomar decisiones". "Es evidente que nosotros hemos buscado una solución y el alcalde sabe cuál es nuestra opinión", abundó sobre Echávarri, del que espera disposición para alcanzar esa solución.

Puig también aseguró que desde el Partido Socialista a nivel nacional, es decir, desde Ferraz, no le han pedido que intervenga en la crisis de Alicante como secretario general del PSPV. "En absoluto, nosotros gestionamos nuestras decisiones", ha asegurado.

A la pregunta de si le harán renunciar, dijo que las decisiones se tomarán en el seno de la reunión de la dirección colegiada. Y de nuevo cuestionado sobre si la pronta solución pasa por la dimisión, respondió: "He sido bastante explicito". También negó que exista un comunicado oficial del PSPV pidiendo de forma inmediata la dimisión de Echávarri asegurando que la decisión del partido se hará pública tras la reunión del Secretariado y no antes, y arremetió contra la presidenta regional del PP, Isabel Bonig, por reclamarla hoy mismo tras el acto del Día Mundial del Agua. De paso instó a los populares a pedir perdón por sus casos de corrupción tras negar que la situación de Echávarri sea equiparable aunque sí admitió que su doble procesamiento tiene responsabilidades políticas por ética.

"La señora Bonig debería hacer un ejercicio de prudencia porque el PP de Alicante tiene dos alcaldes imputados por corrupción, y éste no es el caso del alcalde actual", precisó sobre Echávarri. "Dicho eso, que es evidente que no es equiparable y que no es corrupción, sí hay una crisis política en la que no hemos dejado de dar la cara".

Cuestionado sobre como puede afectar a la gobernabilidad del Ayuntamiento la decisión que pueda recaer sobre Echávarri y si puede devolver la Alcaldía al PP al no contar aún con los 15 votos suficientes para que siga mandando el PSOE, respondió que "los ciudadanos se expresaron con toda claridad en las elecciones, querían un gobierno de progreso y no querían al PP. Todo el mundo es corresponsable de la decisión que se tome, ahora lo es, y en el futuro, eso ya no dependerá sólo del Partido Socialista, dependerá de todos. Hay que ser leales con la ciudadanía y en todo caso, con total rotundidad, el PP haría bien en pedir perdón a los alicantinos por todo lo que han hecho estos años, que aún no han pedido perdón"

PP y Ciudadanos

Por su parte, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha instado al presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV, Ximo Puig a no irse este jueves de Alicante sin la dimisión del alcalde de la ciudad, Gabriel Echávarri, "sobre la mesa o en el bolsillo".

Mientras tanto, la síndica de Ciudadanos (Cs) en las Cortes Valencianas, Mari Carmen Sánchez, ha afirmado que "el secretario general del PSPV, Ximo Puig, tiene la obligación democrática de apartar a Gabriel Echávarri de la alcaldía de Alicante, porque, de otro modo, su silencio lo está convirtiendo en cómplice".