? El presidente de la Semana Santa, Alberto Payá, que ha tenido sus más y sus menos con Echávarri, lo tiene claro. «Debe cumplir su palabra, lo que dijo cuando llegó a la Alcaldía. Creo que ha cruzado su propia línea roja, así que debe ser íntegro. Es una mala noticia para la ciudad Debe ser consecuente y dimitir, si no lo hace pierde toda credibilidad». No piensa lo mismo el presidente de la Federación Alicantina de Moros y Cristianos, Emilio Carretón, quien defiende la presunción de inocencia del alcalde hasta que haya condena. «Aquí no se ha metido la mano en el cajón. Tanto política como personalmente no se puede hundir a una persona hasta que el juzgado dictamine. Ya ha habido casos y no es agradable. Si es culpable tendrá que irse pero hasta que no sea condenado no debe pagar».