Echávarri optó ayer por no dar la cara y dejar en manos de su portavoz en el Ayuntamiento, Eva Montesinos, y de su jefe de Gabinete y también procesado en el caso Comercio, Lalo Díez, la comparecencia ante los medios de comunicación para defenderle y volver a afirmar que no va a dimitir pese a que la Audiencia Provincial lo ha dejado a un paso del juicio oral.

La vicealcaldesa, visiblemente afectada y con los ojos vidriosos, aseguró que el alcalde no va a dimitir. «Seguimos adelante, esto es una denuncia política y en ningún momento vamos a devolver el gobierno a un partido podrido de corrupción», señaló Montesinos, para añadir que «no vamos a devolver el gobierno al PP». Con respecto al presunto fraccionamiento de contratos cuando Echávarri estaba al frente de la Concejalía de Comercio, denunciado por el Partido Popular, la portavoz socialista afirmó que «el alcalde no ha hecho nada, para añadir que «el PP quiere alcanzar la Alcaldía por vía judicial, lo que no alcanzó por las urnas, y en ningún caso lo vamos a consentir».

A las preguntas de los periodistas sobre los estatutos del PSPV que ponen en el juicio oral la línea roja de la dimisión de sus cargos públicos, Eva Montesinos señaló que estos estatutos «se pensaron para casos cuando el país estaba inmerso en todos esos procesos que sabemos que afectan al PP».

Por su parte, el jefe de Gabinete de Echávarri, Lalo Díez, también procesado por el caso del presunto fraccionamiento de contratos en Comercio, acompañó a Montesinos en su comparecencia pero sólo dijo que desde el partido socialista «cuando llegue el momento se harán las declaraciones oportunas». Díez sí aprovechó para arremeter contra el PP y contra Barcala del que dijo que «no es nadie para hablar» porque «ni veía ni oía cuando en esta ciudad, en esta comunidad y en este país se repartían sobres, se pintaban los planos de azul y la gente se iba a yates y a viajecitos en avión privado pagado por empresarios».