? Más del 90% de los contadores ya son inteligentes, de manera que no hace falta que un técnico pase por casa para hacer la lectura. El objetivo es que las facturas adquieran una total precisión y se basen únicamente en el consumo real. Las distribuidoras tienen de plazo hasta el 31 de diciembre de 2018 para sustituir el 100% de los contadores tradicionales. Entre sus ventajas destaca que facilitan la optimización del suministro para cada hogar en función de sus necesidades, agilizan los cambios de condiciones contractuales al poder realizarse remotamente sin intervención y suponen una mayor rapidez en el cambio de potencia y tarifas para el cliente. También disminuyen los tiempos de interrupción del suministro en caso de avería.