Eliminar las restricciones de altura, eliminar las medidas que limitaban la volumetría y edificabilidad de edificios catalogados sin tener en cuenta los planes especiales de los que forman parte y eliminar las fichas que puedan modificar la clasificación o calificación del suelo y, muy especialmente, en aquellos que afectan al suelo industrial. Éstas son líneas marcadas por la Concejalía de Urbanismo, ahora en manos de la socialista Eva Montesinos, ante las reuniones previstas esta semana con los grupos de la oposición para intentar buscar el consenso en torno al Catálogo de Protecciones. La versión elevada al pleno municipal por el anterior edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón (Guanyar), fue rechazada por la entonces oposición (PP, Ciudadanos y los dos ediles tránsfugas).
El Ayuntamiento de Alicante anunció ayer que esta semana se iniciarán las reuniones con los grupos políticos de la oposición para «desbloquear la aprobación del Catálogo de Protecciones». Con ese objetivo, el gobierno municipal adelantó ayer que ha realizado un «trabajo-propuesta fundado en las alegaciones presentadas por el grupo municipal socialista en febrero del año 2017 y que se entregará a todos los grupos para su valoración y la aportación de aquello que estimen conveniente». El equipo de gobierno propone, según un comunicado de ayer, «la eliminación de las restricciones de altura, una medida que representa un ahorro en indemnizaciones para los alicantinos de más de 71 millones de euros, según el importe correspondiente al valor de construcción».
Por otro lado, el PSOE también apuesta por la eliminación de «todas las medidas que limitaban la volumetría y edificabilidad de edificios catalogados sin tener en cuenta los planes especiales de los que forman parte». Igualmente, el gobierno de Echávarri propone, respecto al documento inicial de Pavón, «la eliminación de todas las fichas que puedan modificar la clasificación o calificación del suelo y, muy especialmente, en aquellos que afectan al suelo industrial». Dentro de la propuesta del PSOE, según precisaron ayer, que se entregará a los grupos municipales, «se incluye también la eliminación de los excesos de protección de bienes más allá de lo expresamente establecido por la ley o los acuerdos que los declararon como tal».
Pavón calificó ayer la propuesta del PSOE como «descafeinada, vacía e insulsa», en la que «priman los intereses particulares sobre los generales de la ciudad», y a su vez aseguró que, con ese texto alternativo, «no se impediría recrecer la Casa Carbonell o urbanizar lo que queda sin construir de la Huerta de Alicante en el entorno de las torres protegidas».
Desde Compromís, su portavoz municipal, Natxo Bellido, quiso «agradecer» ayer al ejecutivo local «que recoja la petición» que lanzó en el Debate sobre el Estado de la Ciudad, celebrado a finales del pasado año, de reabrir el diálogo para aprobar el Catálogo».
