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Educación sustituye a la profesora alérgica a la tiza después de abrirle un expediente

Los padres fuerzan a tomar medidas contra la interina y reclaman un plan de recuperación para sus hijos

Alumnos en la puerta de un instituto.

La pesadilla que arrastran desde el inicio del curso más de un centenar de alumnos del Instituto Jaime II de Alicante, por la continuas ausencias de una profesora de Matemáticas, parece haber llegado a su fin.

La Conselleria de Educación ha decidido finalmente abrir un expediente a esta docente interina, a raiz de las sucesivas denuncias de los padres de alumnos, y ayer, cinco meses después de arrancar el curso, la sustituyó por otra profesora.

La última reclamación que los padres entregaron por registro en la dirección territorial de Educación, hace dos semanas, reivindica expresamente «máximo respeto para nuestros hijos en su proceso de enseñanza-aprendizaje porque no podemos obviar que han permanecido desde que comenzó el curso sin recibir prácticamente clases de Matemáticas, provocando un grave déficit en la adquisición de los contenidos del currículo por razones ajenas».

Como consecuencia del absentismo de la profesora de esta asignatura, los padres de alumnos han reclamado a Educación que ponga en marcha un plan de recuperación para sus hijos, ya que el resultado de la falta de clases ha desembocado en «la imposibilidad de evaluar el primer trimestre del curso en esta materia y una tendencia similar en el segundo, si no se actúa con urgencia y eficacia».

La protesta

La protesta conjunta de las familias ha forzado finalmente a la conselleria a tomar cartas en el asunto, aunque aseguran desde el departamento de Marzà que esta profesora «tiene dos expedientes abiertos, uno del curso pasado y otro por el tema de este año».

En sus escritos, los padres detallan el comportamiento de la docente en los pocos momentos que asistió a clase a partir de lo que expresan los alumnos. «Entra en el aula y no imparte materia, dejando al alumnado que hable o haga lo que libremente considere». «Constantes retrasos argumentando que en vez de usar las escaleras ha de utilizar el ascensor». «Continuos reproches al alumnado y permanentes comentarios aduciendo la imposibilidad de dar clase», señalan.

El jueves de la semana pasada, dado que la docente seguía ausente, Educación sacó la plaza a adjudicación, pero no se consiguió dotar y se concedió el viernes como una plaza tipificada de «difícil cobertura». La nueva profesora se incorporó ayer al centro.

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