El Ayuntamiento de Alicante, a través de la concejalía de Infraestructuras y el departamento de Zonas Verdes que rige la edil socialista Gloria Vara, ha puesto en marcha el proyecto de Restauración Vegetal e Instalación de Riego en el Monte Benacantil, una iniciativa cuya inversión total asciende a 485.000 euros y un periodo de ejecución de tres meses. Gracias a ello, se consigue dotar al área de un bosque metropolitano en pleno centro de Alicante.

Los objetivos principales de la actuación son preservar el valor ecológico y cultural de la zona, hacer compatible el uso social con la conservación, fomentar las actividades de paseo y contemplación mediante espacios en los que el visitante pueda apreciar la naturaleza y su integración con la ciudad. La reforestación está orientada hacia la ordenación paisajística para el disfrute del usuario con la creación de un nuevo arbolado y el mantenimiento del existente. También, la nueva red de riego supone un ahorro considerable de agua y mayor control gracias al cambio de su automatismo.

Para la edil de Infraestructuras conservar y mejorar la vegetación de la zona, así como la instalación de un sistema de riego compatible, siempre con el uso de agua regenerada "es un plan necesario para dotar a un lugar de gran valor y riqueza arqueológica de los recursos naturales necesarios". Y ha añadido que "el Monte Benacantil, con su emblemático Castillo de Santa Bárbara, es un pulmón verde integrado en plena ciudad, por lo que merece toda la atención del equipo de gobierno socialista para preservarlo, con el objetivo de convertirse en un lugar de referencia y de visita con una conservación y mantenimiento óptimo".

El proyecto se encuentra en proceso de licitación sostenible y la fecha límite de presentación de las ofertas concluye el próximo 19 de febrero.

El Consistorio considera que estas actuaciones son necesarias debido a que, en la actualidad, el monte se encuentra con rodales de arbolado en muy mal estado, con edades muy avanzadas y unas parcelas en las que no se ha conseguido la repoblación de las especies así como la total inexistencia de regenerado natural del pinar. El Departamento de Zonas Verdes ha realizado un estudio previo del terreno para llevar a cabo diversas acciones para conseguir los objetivos marcados: instalación de una red de riego que abastezca a las nuevas plantaciones, restaurar los ecosistemas degradados, reforestar los terrenos desarbolados con especies del lugar repoblando o favoreciendo su regeneración natural mediante la ordenación de sus aprovechamientos, proteger los recursos naturales, establecer una adecuada protección del suelo, contemplando en cada caso su potencial biológico y la capacidad productiva del mismo, además de proteger el paisaje y su grado de naturalidad de las distintas actividades que se puedan desarrollar.

Asimismo, se procede a la adecuación del acceso peatonal desde la calle Sant Caietà, reconstrucción de muros y mejora de plantaciones, retirada de pinos secos y de especies vegetales invasoras, instalación de una valla de protección, reconstrucción de muros, acondicionamiento de senderos, eliminación de grafitis, restauración de canalización para conducción de aguas fluviales, demolición y retirada de restos de obras, vegetales así como materiales. Por último, se procede a la señalización del acceso al Parque de la Ereta y de la Muralla que rodea el complejo.

En lo que respecta a la red de riego, se amplía para abastecer a las nuevas plantaciones, cambiando el sistema de automatismo que ahora funciona mediante programadores autónomos a batería para integrarlo en el sistema de control centralizado municipal para fomentar el ahorro de agua y tener un mayor control de la red. Paralelamente, se instalarán seis cañones de riego para realizar riegos de emergencia en las zonas más altas de la ladera, las cuales se abastecerán del cabezal de riego que se encuentra ubicado en el aparcamiento de acceso al parte de la Tuna.

El Monte Benacantil es un espacio natural que juega un papel importante a nivel ecológico y paisajístico, contemplado dentro de la zona denominada "Castillo de Santa Bárbara", incluida en las zonas de vigilancia arqueológica que el Consistorio tiene establecidas dentro del Catálogo de Protecciones en su capítulo IV "Patrimonio Arqueológico y Paleontológico", por lo que durante el desarrollo de los trabajos se realzarán las tareas de seguimiento arqueológico a expensas que pudieran surgir restos históricos.