Tan sencillo como enviar un correo electrónico y encontrar una respuesta amable al otro lado del mensaje. Una madre de Alicante quiso cumplir el sueño de su hijo de 12 años con síndrome de Asperger y, con la ayuda de unos mandos de la base militar de Rabasa, Diego disfrutó de un día que nunca olvidará. Este fin de semana, la madre, emocionada, contaba la historia en Twitter.

A finales del año pasado, Eva Crespo mandó una solicitud por correo para visitar la base militar de Rabasa. «Estas Navidades quise que el regalo de Papá Noel fuera lo que más deseaba mi hijo, Asperger de 12 años. Escribí un email a la base militar de Rabasa (Acuartelamiento MOE) de solicitud para visitar la base».

Y esa petición fue muy bien recibida. «Nos citaron a la semana siguiente de Navidad. Sólo estábamos nosotros. Al llegar nos recibió el Comandante de la base y quien iba a ser nuestro guía. Se cuadraron delante de mi hijo. Tras dos horas y media, estuvimos visitando las instalaciones, escuchando la historia del MOE».

La madre destaca el trato recibido en la base alicantina por parte del Ejército de Tierra. «El museo, enseñando a mi hijo a desfilar con un fusil antiquísimo y regalarle una camiseta del ejército». Eva se detiene para relatar que «al despedirnos de nuestro guía (mil perdones por no saber su rango) me confiesa que había leído sobre el Síndrome de Asperger para saber cómo hablarle y dirigirse a él».

Por todos estos motivos, la madre impulsora de esta historia asegura: «Hoy quiero expresar mi más profundo agradecimiento a @EjercitoTierra. Aún se me caen las lágrimas de agradecimiento. El trato, la delicadeza, el respeto, la comprensión...sin conocernos de nada. Cuando en la propia familia nadie se ha molestado ni en saber sobre el #autismo. Por todo ello, gracias, gracias y gracias. Sois mis héroes». Al fin y al cabo, como cuenta Eva Crespo, estos «héroes sin capa no saben la repercusión de su hazaña: graban para siempre una bonita experiencia en el alma del niño y de la madre que será recordada toda la vida».