El juez que investiga el asesinato de la viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala ha admitido incorporar a la causa un informe pericial que descarta manipulaciones del teléfono de la víctima tras los disparos, según la resolución a la que ha tenido acceso INFORMACIÓN. El estudio concluye que el Whatsapp de la víctima se activó de manera automática la noche del crimen, sin que nadie utilizara el terminal. La prueba pericial ha sido aportada por el primogénito de María del Carmen Martínez, que está personado en la causa como acusación particular, y en ella se rechazan algunas de las conclusiones del informe que el pasado noviembre presentó en el juzgado la defensa del único sospechoso del crimen.

María del Carmen Martínez murió tiroteada la tarde del 9 de diciembre de 2016 murió tiroteadamientras recogía su coche de Novocar, empresa de automoción que regentaba su yerno, Miguel López. Casi dos meses después del crimen, López fue detenido como presunto autor del asesinato asesinato y en la actualidad está en libertad bajo fianza. La defensa presentó el pasado noviembre un estudio del teléfono de la fallecida que concluía que el día del crimen el móvil de la víctima se conectó al Whatsapp a las 18 horas, 55 minutos, momento en que Miguel López ya no se encontraba en Novocar. La defensa sostenía que ese dato avalaba la inocencia del sospechoso. El estudio también decía que se borraron llamadas del teléfono con posterioridad al crimen y reclamaba que se investigaran estos hechos.

El nuevo informe pericial aportado por Vicente Sala rechaza estos extremos y los achaca a «procesos automáticos del teléfono». «El registro de transmisión de datos de las 18.55 horas presentado por el informe pericial de la defensa no se corresponde con una intervención directa de una persona sobre el teléfono a esa hora, sino que responde a un proceso automático», concluye el perito.

Según el estudio aportado al juzgado, el único mensaje de Whatsapp enviado por María del Carmen Martínez el día del crimen fue a las 15.30 horas. En las pruebas realizadas con un terminal idéntico a la de la víctima, se constata que hay registros de transmisión de datos que no se producen como consecuencia de la interacción de una persona. «Sólo se necesita que la aplicación esté funcionando en el dispositivo del usuario», concluye.

Asimismo, el perito concluye que la agenda del teléfono se modifica continua y automáticamente, también sin que intervenga el usuario. También se descarta que se hubieran borrado llamadas del terminal, tal como concluía el informe de la defensa. «El teléfono ya estaba bajo custodia policial desde antes de que se produjeran las llamadas supuestamente eliminadas», advierte el técnico que ha examinado el móvil. En el informe se asevera que esas llamadas «no fueron nunca borradas» y que éstas sí que se encuentran en el historial de llamadas del móvil restaurado. Las conclusión del informe es que se trata de otro proceso automático dentro de las bases de datos, por el que esta información se mueve a otro lugar «porque necesitaba más espacio» ante alguna actualización.

El perito de esta acusación particular señala que se ha hecho una copia de seguridad del contenido del teléfono de María del Carmen Martínez y que se ha restaurado en otro modelo similar. Al comprobar las llamadas supuestamente borradas, se ha verificado que éstas sí que se encuentran en el móvil.

Cinco días para los informes de huellas y la autopsia sobre fotos

El magistrado José Luis de la Fuente ha dado cinco días a las partes personadas en el crimen de María del Carmen Martínez para que presenten los informes periciales sobre el estudio de las huellas dactilares en el escenario del asesinato, así como de una segunda autopsia a la víctima basándose en las fotografías de la primera. Para esta prueba, desde la defensa se ha pedido que se les amplíe el plazo para aportar sus conclusiones a 15 días.