La consellera de Sanidad Universal, Carmen Montón, explicó ayer que ante el repunte de la gripe se adoptan medidas «extraordinarias» como habilitar zonas de preingreso o doblar camas en habitaciones individuales, como se ha aplicado en el Hospital de Sant Joan y en La Fe de València, porque «lo importante es atender en condiciones a los pacientes», así como instalar boxes de observación de urgencias «en zonas donde la actuación es más rápida para dar mejor calidad asistencial».

Montón, tras presentar los centros de salud y de especialidades del nuevo espacio sanitario Campanar-Ernest Lluch, señaló al respecto que ante el repunte de la gripe, además del plan de contingencia se adoptan todas las medidas «puntuales» necesarias para poder atender al incremento de la presión asistencial por el repunte de la gripe, que la pasada semana volvió a subir hasta los 227,8 casos por cada 100.000 habitantes.

«Hay muchas posibilidades y son medidas extraordinarias que se deben llevar hacia delante en situaciones donde vemos que hay un repunte de gripe y una mayor presión asistencial», señaló.

En ese sentido,aclaró que estas medidas son «puntuales» que se van poniendo en marcha «en función de las necesidades» ya que la presión asistencial puede variar «hora a hora» a lo largo del día. De hecho, en el citado centro sanitario alicantino ha tenido que habilitar las salas de espera que hay en cada planta del centro para ingresar a los pacientes que son operados de cirugía sin ingreso.

Montón recordó que la conselleria elaboró un plan de contingencia, dotado con 1,3 millones, para hacer frente a la gripe que prevé abrir, entre otras medidas, 500 camas adicionales, además de contratar a 121 profesionales de todas las categorías y a otros 80 en el plan de invierno.

La consellera indicó que es un plan «abierto» y que si se agotan estas medidas «se aumentarán» en función de las necesidades. Este plan se puso en marcha el pasado 15 de diciembre ante la previsión de que este año, como ha ocurrido, se adelantara la llegada de la onda epidémica que entró por Alicante.

Montón afirmó que es difícil prever cuándo se alcanzará el pico de la epidemia aunque ha confirmado que ya se han superado las cifras de la campaña anterior. Por ello, recalcó que el periodo de vacunación finaliza el 31 de enero y recordó que el 95% de las personas contagiadas por el virus no se había vacunado.

La epidemia de gripe se ha cobrado ya la muerte de al menos cinco pacientes en la provincia de Alicante, tres en Elda y dos en la ciudad de Alicante. Todos ellos personas de edad avanzada y con patologías previas que se han visto complicadas con el virus. De hecho, los neumólogos coinciden en señalar que hacía tres años que no veían una epidemia de gripe semejante.