La anécdota de la jornada en Fitur Fitur se acaba de producir en el stand del Ayuntamiento de Alicante debido a que, de repente, no se tenía constancia de quien era el propietario de un abrigo y dos maletas que estaban cerca de los mostradores. Los guardias de seguridad y la Policía han acordonado la zona y han revisado las maletas que han terminado llevándose. Durante esos minutos han llegado también servicios policiales con perros que han olido las maletas y al detectar que no había nada peligroso han levantado el operativo de seguridad.
