La exhibición y descenso de galeras en la cuesta de la Fábrica de Tabacos tuvo su turno ayer en la celebración del tradicional Porrate de San Antón. Dos horas antes de la actividad, a las 10 horas, tenía lugar un pasacalles por los rincones del barrio. Y una hora después, a las 11, la colla Benacantil del barrio San Antón fue la encargada de amenizar la bendición de los puestos del Porrate.