Los sindicatos con representación en el Ayuntamiento de Alicante criticaron ayer al gobierno del PSOE por apostar por la libre designación para nombrar a 34 jefes de departamento y no abrir un concurso de méritos para cubrir los puestos, lo que supone la «politización» de todas las jefaturas municipales. Los cinco sindicatos coinciden a la hora de defender el concurso como el sistema para elegir a los jefes de departamentos, mientras que el criterio se divide sobre el procedimiento para la elección de los jefes de servicio, los técnicos de mayor responsabilidad.
Desde el SEP, Cristabela Zornoza defiende que el gobierno convoque un «concurso de méritos» para las jefaturas de departamento, abogando por la «adscripción definitiva» de ese escalafón técnico. Por su parte, Marisa Navarro (UGT) considera «arbitrario» que los concejales elijan a los jefes de sus departamentos: «La libre designación se tendría que reducir a las jefaturas de servicio para darle así la oportunidad a los funcionarios que atesoran méritos». En la misma línea se muestra Marian Molero (CSIF), quien defiende que el mérito y la capacidad de los trabajadores sea la base para la elección de los jefes de departamento. «Sacar las plazas a dedo plazas a dedoes lo mismo que teníamos con el PP y que tanto criticamos. Con la libre designación lo que consigues es quitar la ilusión de los trabajadores para promocionar», señaló ayer. Por su parte, Sergio Casares (CC OO) admite que el proceso seguido por el gobierno es «legal», aunque de igual forma defiende que los jefes de departamento se elijan a partir de un concurso de méritos y no por designación directa del concejal delegado. Por último, Pedro Calero (SPPLB) apuesta por la elección a dedo como una «excepcionalidad» y no un procedimiento habitual. «Pedimos que todos los puestos sean provistos por medio del concurso público», señalaron desde el sindicato de Policías y Bomberos.
