Un consorcio tecnológico formado por el centro tecnológico Ainia y las empresas Ingeniería de Verificaciones Electromecánicas y Mantenimientos (IVEM) en colaboración de la asociación nacional de cooperativas agrarias, ha desarrollado una innovadora planta piloto capaz de regenerar y reutilizar las aguas residuales procedentes del lavado de los cítricos en la postcosecha. El proyecto ha estado apoyado por el Ministerio de Agricultura.

El lavado de productos citrícolas durante la postcosecha puede llegar a requerir hasta mil litros de agua/hora por cada línea de confección, lo que supone un consumo diario de 50.000 litros de agua potable para un almacén que procese 1.000 toneladas de cítricos/día. Este proceso de lavado genera a su vez aguas residuales que contienen los compuestos empleados para minimizar las pérdidas de producto asociadas al deterioro o la podredumbre de éste antes de su llegada al consumidor final.

El prototipo demostrativo, con capacidad para regenerar hasta 1.000 litros de agua por hora, está formado por un tren de tecnologías de tratamiento de aguas que incorpora procesos sinérgicos. En primer lugar, el agua procedente de las lavadoras de cítricos se filtra para reducir la concentración de partículas en suspensión. El agua filtrada, a continuación, se somete a un proceso de oxidación avanzada basado en la combinación de ozono y radiación ultravioleta, el cuál elimina tanto contaminantes emergentes como microorganismos.

De este modo, el sistema consigue regenerar in situ agua con calidad óptima para su reutilización en los procesos de lavado. Por una gestión ecoeficiente de los recursos hídricos en la industria citrícola, la planta experimental, que se testará en la Cooperativa de Bétera (València), supone un respaldo para el sector agroalimentario en sus acciones por realizar un uso responsable y sostenible del agua como recurso limitado y cada vez más valorado por los consumidores.

Para Jose B. Carbajo, responsable de proyectos de Ainia, "la aplicación de este tipo de tecnologías en aguas industriales está en auge debido a que posibilitan de una forma segura y sostenible el tratamiento de regeneración de agua para su reutilización en los propios procesos industriales. Esta planta piloto demuestra que es posible tratar y acondicionar el agua a la calidad que exige su reutilización dentro de la línea productiva, para conseguir un uso más eficiente del recurso hídrico”.

“Los resultados obtenidos en el proyecto ECO3WASH suponen una respuesta a la necesidad de la industria citrícola de establecer planes de actuación que cambien el modelo lineal de usar y depurar el agua por modelos circulares donde se optimizará el uso del agua y se abandonará el concepto de agua residuales las cuales se considerarán recursos valiosos a reutilizar o reciclar. ECO3WASH ayuda a cerrar el ciclo del recurso hídrico en la industria agroalimentaria, contribuyendo al desarrollo de las estrategias sobre eficacia en el uso de los recursos en el marco de los modelos de producción bajo Economía Circular”, añade Jose B. Carbajo.