El Síndic de Greuges, José Cholbi, ha abierto una queja de oficio para investigar y supervisar la actuación de la administración «ante la situación de insalubridad» en el barrio Miguel Hernández (también conocido como barrio de José Antonio) tras la denuncia de los vecinos, reflejada ayer por este diario, de la proliferación de chinches en algunas viviendas así como la falta de limpieza y desinfección en zonas comunes del citado barrio.

El defensor alude a las declaraciones de los dirigentes vecinales y de algunas familias que aseguran haber denunciado hace unos meses esta situación ante la administración autonómica y local sin obtener una respuesta satisfactoria. El Síndic se dirigirá en los próximos días tanto al Ayuntamiento de Alicante como a la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE) para solicitarle información sobre las actuaciones que tienen previsto desplegar para lograr la limpieza y desinfección de las zonas afectadas.

El defensor del pueblo recuerda que no es la primera vez que interviene en esta zona de la ciudad. «Sin ir más lejos, en el año 2016, tramitó la queja de una vecina que denunciaba el mal estado de conservación de las zonas comunes del barrio (aceras, arbolado, bancos y demás mobiliario urbano), así como problemas de inseguridad ciudadana y ocupación ilegal de viviendas públicas vacías», señala la entidad en una nota remitida a este diario. El Síndic recomendó entonces que se adoptaran todas las actuaciones necesarias para atender las necesidades del entonces barrio José Antonio de Alicante, en materia de rehabilitación, regeneración y renovación urbana de la zona».

Por su parte, la EIGE, Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (el antiguo IVVSA), propietaria de las viviendas de este barrio, aseguró ayer en un escrito que, «en el registro de entrada de EIGE solo consta una reclamación de hace dos meses informando de la existencia de chinches en una vivienda del barrio Miguel Hernández», aunque los vecinos aseguran que han reclamado en la entidad en varias ocasiones sin resultados.

La EIGE afirma también que «no tiene constancia de ninguna notificación informando sobre la plaga por parte del Ayuntamiento de Alicante». En cuanto a si va a adoptar medidas, la entidad señala que «está analizando el tema y lo abordará en mayor profundidad» aunque recuerda que «cuando los arrendatarios accedieron a residir en esas viviendas, los inmuebles se encontraban en buenas condiciones de habitabilidad, libres de cualquier tipo de plaga» y que, aunque se analizará la situación en el barrio, « en el pasado se han producido situaciones similares respecto a este problema y se concluyó que correspondía al inquilino de la vivienda resolver el problema».