Un total de 46 colegios de la provincia de Alicante acumulan en sus techados cerca de 30.000 metros cuadrados de fibrocemento o amianto, mineral maleable cuya descomposición en fibras puede causar graves perjuicios para la salud, de ahí la reivindicación histórica de AMPAs, vecinos y sindicatos de enseñanza por su completa erradicación, que vuelve a retrasarse una vez más para la mitad de estos centros.
«Nuestra exigencia de retirada de todo el fibrocemento de los centros ha de ser y es más fuerte si cabe cada día que pasa y, por tanto, criticamos con rotundidad cualquier retraso o demora». Los delegados de CC OO en el Comité provincial de Seguridad y Salud subrayan que la previsión de retirada del amianto, facilitada recientemente por la dirección territorial de Educación, deja para 2019 la mitad de los colegios que todavía tienen fibrocemento.
Aunque se insiste en que no existe peligro inminente para el alumnado y profesorado, siempre que no se desprenda o remueva el material, «para CC OO, no obstante, cualquier retraso en el calendario previsto es inadmisible y así lo hemos denunciado desde el Comité de Seguridad y Salud», añaden.
Adjudicadas
La conselleria, en su empeño por agilizar estas obras de retirada del amianto, no descarta que los ayuntamientos de los centros afectados se impliquen para favorecer la agilidad de unos trámites que, al igual que los de las obras de remodelación de los centros escolares, resultan «con exceso de burocracia». CC OO «aplaude cualquier medida de agilización que, como la iniciativa que algunos ayuntamientos están teniendo, persiga adelantar plazos de eliminación del fibrocemento en sus municipios».
La mitad de los centros afectados tienen ya las obras de retirada adjudicadas o en proceso de tramitación, redactado ya el pliego de condiciones técnicas. Educación sostiene que a lo largo de este curso, durante las próximas vacaciones de Navidad, las de Pascua y Semana Santa, o las de verano, se erradicarán las placas y bajantes con amianto.
En esta situación se encuentran los colegios de Alicante: Gloria Fuertes, José Carlos Aguilera . El Tossal, Rabassa, San Nicolás de Bari, Gabriel Miró, Azorín, Emilio Varela y el IES Cavanilles. En Elche el Virgen de la Asunción, Baix Vinalopó, Tamarit y el IES La Torreta. En Crevillente , Más Magro y Miguel Hernández. En Almoradí, Canales y Martínez. En Orihuela la Escuela de Arte Superior y Diseño. En Benijófar el San Jaime. En Dolores, el Virgen de Dolores. En Elda, Miguel de Cervantes. En Poble Nou, Santa María Magdalena. En Ondara el Sanchis Guarner y en Orba, Hispanitat.
La conselleria entiende que se prioriza a estos centros sobre la otra mitad, que también tienen fibrocemento en techumbres, cubiertas o bajantes, porque «la cantidad es menor en las actuaciones previstas para 2019 que las de este curso 2017-18, que presentan mayor superficie de fibrocemento».
Solo los colegios afectados de Alicante reúnen la mitad de todo el fibrocemento detectado en centros de la provincia, unos 15.000 metros cuadrados. «Si la 'vida útil' de esas placas y canalizaciones está tasada desde el principio de uso, allá por los años 60 del siglo pasado, hace décadas que se superó el límite de seguridad y el riesgo aumenta a medida que se alarga», alerta CC OO.
Pendientes
La otra mitad de los centros en los que se prevé actuar, pero ya en 2019, son: Casablanca, Carlos III, Jaime I, Menéndez Pelayo, Victor Pradera, Jaime Balmes, Eugeni d'Ors, Mediterrani, San José de Calasanz y La Baia de Elche. Benacantil de Alicante. Virgen del Rosario de Albatera. Manuel de Torres de Almoradí. Antonio Sequeros de Benejúzar. Rafael Altamira de Callosa del Segura. José María Paternina de Daya Nueva. Juan Carlos I de Formentera del Segura. Virgen de Monserrate y Nuestra Señora Monserrate, de Orihuela. Azorín de Santa Pola, y el IES Las Lagunas de Torrevieja.
