La asociación cultural Dánae prosigue esta tarde con una mesa redonda en la que se discutirá sobre si existe o no respeto a la diversidad en la ciudad de Alicante, un debate que se enmarca en las actividades organizadas en el XV aniversario del colectivo.

Los participantes son Sofía Morales, profesora y concejala del Ayuntamiento de Alicante; Pablo Rosser, profesor y técnico del Ayuntamiento de Alicante; Juan David Santiago (técnico de la UA y exrepresentante del colectivo gitano; Toño Abad, representante de Diversitat; Soad Kchtil, mediadora intercultural; y Mari Carmen Navarro, representante de Alicante Accesible.

La mesa redonda comenzará esta tarde a las 19.30 horas en la sala Altamira de la Sede Universitaria de Alicante.

Según explica Rosser, instituciones y colectivos trabajan para que exista diversidad en Alicante. "Tanto la diversidad de sexo pero no menos importante la pluriculturalidad en una ciudad con barrios que tienen ya gran población inmigrante que hay que incorporar a nuestra ciudad favoreciendonos de sus culturas", afirma.

Rosser añade que, en esta línea, desde el área de Memoria Histórica y Democrática del Ayuntamiento de Alicante "hemos puesto en marcha dentro del Proyecto Europeo de la EDUSI un ambicioso trabajo de recuperación de la memoria de los barrios pero incorporando a las nuevas culturas de la gente que vive allí ahora".

Reuniones

Con este motivo ya se han celebrado reuniones previas, como la que la concejala de Acción Social y Vivienda, Julia Angulo, mantuvo con el antropólogo, sociólogo y experto en intervención comunitaria, inmigración y mediación cultural, Marco Marchioni, en la que abordaron los detalles del estudio y diagnóstico de la situación actual en la convivencia vecinal intercultural en el barrio de Carolinas Bajas.

Se trata de la primera fase de proyecto, incluido en la Estrategia de Desarrollo Sostenible Integrado, EDUSI, dirigido a responder a las dificultades de convivencia vecinal que se están produciendo en este barrio de Alicante y orientado a establecer puentes de convivencia entre comunidades enfrentadas en la actualidad.

Así, entre los objetivos de este programa se encuentra, identificar y reconocer los conflictos existentes en el territorio de los distintos actores, sus capacidades, promover la incorporación de las partes en los procesos de convivencia vecinal y generar espacios de encuentro que facilite la relación vecinal.

El proyecto está cofinanciado por la Comisión Europea con cargo al FEDER, dentro del Eje 12 "Eje Urbano", del programa operativo de crecimiento Sostenible para la programación 2014-2020, "Una manera de hacer Europa". La primera fase, que se inició el 1 de septiembre, tras su adjudicación por concurso público, tiene una duración de 3 meses y veinte días y su coste es de 17.900 euros más IVA.