En un mundo tan tradicional, donde cualquier cambio puede generar mucho rechazo, crear y comercializar una corona funeraria compuesta por macetas, tiene mucho mérito. Si además, te conceden uno de los premios internacionales más prestigiosos de diseño de productos, el éxito no pude ser mayor.

Este es el caso de la empresa alicantina Limbo, que ha ganado uno de los German Design Awards 2018 con «The green memory». El producto, que nace con un plan de expasión interncional, transforma la tradicional corona funeraria, con flores pinchadas que acaban podridas en el cementerio, en un recuerdo vivo, participativo y responsable con el medio ambiente. Su principal novedad radica en la sustitución de la flor cortada por tiestos de plantas vivas, que pueden repartirse entre familiares y amigos.

Víctor Humanes, responsable de Innovación del Grupo ASV, para la que trabaja la empresa Limbo, explica que el concepto «parte de darle la vuelta de tuerca a algo tan tradicional. Hemos testado el producto y ha sido muy bien recibido. Aporta la idea de que te llevas una parte de esa persona a tu casa, que su recuerdo se reparte entre los más allegados».

Como cualquier otro cambio, «el objetivo es ayudar en el proceso del duelo, hacerlo lo más natural posible», añade Humanes.