Transcurrido casi un año desde que la alcaldía decretó el cambio de horario para los conserjes escolares, -a petición del colectivo para acomodarse a la jornada continua que ya han aprobado todos los colegios públicos de la ciudad menos el Ramón Llull-, los centros de Infantil y Primaria siguen sin tener un profesional que atienda desde las 15.00 horas las necesidades escolares.

Aunque con el inicio del curso algunos colegios vieron duplicar los contratos a conserjes y pensaron que finalmente el alcalde había cumplido su compromiso ante el conseller Marzà, de cubrir por la tarde el cierre de los colegios, lo cierto es que desde mediados de mes han vuelto a quedarse con su conserje de siempre, uno solo que se va a las 15:00 horas mientras el colegios cierra a las 17:00 porque se ofrece comedor y actividades extraescolares voluntarias a los alumnos.

Ayer los directores de estos centros se plantaron y acudieron en masa a la jefatura territorial de Educación para registrar un escrito de queja en el que se dirigen tanto al alcade como al conseller.

«Ante la incumplida promesa del señor alcalde de buscar soluciones, le exigimos encarecidamente que arbitre las medidas oportunas para restablecer en todos los centros de la ciudad los servicios que la normativa de Régimen Local le otorga, y que debe prestar a sus ciudadanos".

"Igualmente, instamos a los responsables de la Conselleria de Educación para que de forma decidida intervengan en la resolución del citado problema, y exija el cumplimiento de las obligaciones que el Ayuntamiento ha de prestar a la ciudadanía en materia educativa», señalan en el escrito.

Carencias

Desde la Concejalía de Educación confirman a este diario que son 17 los conserjes finalmente previstos para doblar el turno en los colegios de jornada continua, que suman 51, pero que estos profesionales estarán vinculados a colegios con buenas instalaciones deportivas.

La intención del Ayuntamiento, todavía sin poner en práctica, es destinar estos bedeles a la apertura de instalaciones deportivas escolares por las tardes, pero siempre que haya una asociación deportiva que se responsabilice de la actividad que se vaya a llevar a cabo en los centros que tengan espacios para ello.

Los directores reclaman los conserjes de tarde porque ahora no tienen quién se encargue de la «vigilancia, custodia y control de entrada de personas ajenas al centro; del cierre de puertas, ventanas, persianas, custodia de llaves y conexión de alarmas; de las llaves de paso de agua, gas, y calefacción en caso de avería; del control de emergencias en electricidad, ascensor, gas y agua; y de revisar al final de la jornada todas las instalaciones, además de atención e informar al público y controlar el mantenimiento».