Técnicos municipales atribuyeron ayer al entonces asesor de Comercio Pedro de Gea como la persona que gestionó los expedientes investigados por un presunto fraccionamiento de contratos en esta concejalía en el Ayuntamiento de Alicante, según confirmaron a este diario fuentes judiciales.
Por esta causa están investigados el alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, el jefe de Gabinete de Alcaldía, Lalo Díez, y De Gea. Las facturas llegaban a la mesa de los técnicos con los servicios ya prestados y, en ocasiones, sin haber pasado previamente por ellos.
De Gea habría realizado las contrataciones que posteriormente habrían avalado el alcalde y Díez con su firma. La magistrada María Luisa Carrascosa investiga si hubo fraccionamiento de contratos en 25 facturas que suman un importe de 190.000 y que sufragaban gastos de la Gala del Comercio, la imagen de los mercados municipales y de la campaña de Navidad correspondientes a 2016.
El interventor municipal alertó de un presunto fraccionamiento de contratos cuando las facturas llegaron a su mesa, tras lo que se creó una comisión de investigación. La investigación se inició tras las denuncias presentadas por el PP, que está personado en la causa como acusación particular, y por Ciudadanos.
Ayer estaban citados en el juzgado como testigos hasta siete técnicos de la concejalía, entre los jefes de los departamentos de Comercio y Mercados, cuyas declaraciones fueron las de mayor extensión y se prolongaron durante más de 45 minutos cada una; mientras que los responsables de los cuatro mercados municipales (Central, Babel, Benalúa y Carolinas) y el técnico de Dinamización Comercial estuvieron poco más de diez minutos.
Ninguno de los siete tuvo conocimiento de los contratos hasta que llegó el momento de la adjudicación. Los responsables de los mercados poco pudieron aportar puesto que al no tener capacidad de firma, ninguno de esos expedientes pasó por su mesa. Ninguno de ellos había pasado por la comisión de investigación creada por el Ayuntamiento para aclarar estos hechos.
Otra manera
Según las fuentes consultadas por este diario, la jefa de Comercio declaró que llegó a advertir a Pedro de Gea de que por el valor de los contratos no iba a dar tiempo a tramitarlos de otra manera que no fueran contratos menores antes de que finalizara el año y que ella lo hubiera hecho de otra manera. En esta línea, apuntó a que en la Gala de Comercio del año anterior los contratos sí que se agruparon en uno para el que se firmó un convenio.
En parecidos términos se ha manifestado el jefe de Mercados que, aunque en la fecha en la que se produjeron los hechos se encontraba de vacaciones, considera que todo se tenía que haber realizado en una sola factura y con contrato. Con el expediente ya finalizado el papel de los técnicos se limitó a constatar la realidad de los trabajos contratados.
Los tres investigados sostienen que no hubo fraccionamiento de contratos y que el Ayuntamiento podía contratar esos servicios de manera separada, puesto que no formaban parte de la misma «unidad funcional». Asimismo inciden en que ninguno de los técnicos había expresado dudas o reparos sobre la fórmula elegida hasta que empezaron a llegar las facturas.
La Ley permite a las administraciones contratar a dedo para servicios inferiores a 18.000 euros. Para importes superiores se obliga a convocar un concurso para su contratación y otorgarlo al que realiza la mejor oferta.
Las declaraciones proseguirán el próximo 26 de octubre y el 6 de noviembre donde comparecerán como testigos los responsables de las 13 mercantiles que prestaron los servicios de las facturas bajo sospecha.
