La mortalidad por cáncer de mama ha registrado una disminución del 18,22% desde el año 2000 en la Comunidad Valenciana. En concreto, según datos de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, ha pasado de una tasa de 28,71 casos por cada cien mil mujeres en el año 2000 a una tasa de 23,48 en el año 2015.

En 2015, en la Comunidad se diagnosticaron 3.330 casos nuevos de cáncer de mama. Este tipo de cáncer es el más frecuente entre las mujeres, por lo que desde la conselleria, y aprovechando el Día Mundial del Cáncer de Mama, se ha insistido en la importancia que tiene el programa de cribado entre las mujeres, ya que un diagnóstico precoz es fundamental para elevar la tasa de supervivencia de esta patología.

Actualmente, el cáncer de mama representa el 29,21% del total de cánceres diagnosticados en la Comunidad. Se trata de un tipo de cáncer que puede producirse en edades tempranas, pero las tasas se incrementan notablemente a partir de los 45-50 años y registra tasas de incidencia mayores en mujeres de edades comprendidas entre los 65 y 69 años de edad.

La consellera Carmen Montón, ha destacado que «en estos momentos la tasa de supervivencia al año del diagnóstico se sitúa en 96,4%, y a los nueve años en un 90,7%» y ha añadido que «desde Sanidad se está realizando un importante esfuerzo para incrementar la participación de las mujeres en el cribado de cáncer de mama con el fin de realizar una detección precoz, y para coordinar toda la parte asistencial de manera que reciban el mejor tratamiento».

También ha insistido en la importancia de la detección precoz el director de la Plataforma de Oncología del Hospital Quirónsalud Torrevieja, Antonio Brugarolas, quien ha destacado los avances que se están llevando a cabo para la prevención y el tratamiento del cáncer de mama y que han posibilitado que incluso en los tipos más agresivos en los que hay metástasis, se haya duplicado la supervivencia a 5 años «y en la actualidad es un cáncer que ya no asusta tanto porque además se han ido produciendo avances en todos los tipos de cáncer de mama y los pronósticos son mucho mejores».

En este sentido, el oncólogo ha señalado que «éste ha sido un buen año en el tratamiento del cáncer de mama» gracias a avances en los tratamientos hormonales, farmacoterapia personalizada y el tratamiento del cáncer con radioterapia intraoperatoria en quirófano, que permite en algunos tipos de cáncer realizar en una sola intervención quirúrgica, la extirpación del tumor, la irradiación y la reconstrucción de la mama suprimiendo las sesiones de radioterapia externa.

Además, tal como indicó ayer Antonio Brugarolas, «este año nos hemos comprometido a poner en marcha una microcirugía de los vasos linfáticos de la axila cuando hay que hacer una cirugía de la axila, para evitar la complicación del linfedema que es el hinchazón del brazo que produce limitaciones y problemas posteriores».

Brugarolas ha lanzado un mensaje de optimismo recordando que en España hay unas 200.000 personas curadas de cáncer.