El nuevo plan del Consell para agilizar la construcción y reforma de centros educativos en toda la Comunidad, da opción a los ayuntamientos para privatizar los proyectos de los que no puedan hacerse cargo por la falta de personal técnico suficiente, aunque el coste estará incluido en el presupuesto global que adjudique la Conselleria de Educación previamente por cada obra.

En cuanto se publique el nuevo decreto ley -previsto esta misma semana-, que contempla el denominado proyecto «Edificant», -«para ser más eficientes entre todos, sumando manos a la construcción de colegios», como ha explicado el conseller Vicent Marzà a todos los alcaldes asistentes al acto de presentación en Valencia-, los ayuntamientos podrán adherirse voluntariamente con su listado de prioridades escolares a través de la web de la Generalitat.

«La Generalitat no está delegando funciones. La conselleria continuará construyendo colegios e institutos. El objetivo es sumar esfuerzos para hacer más centros y más rápido», recalca el conseller. Abriendo la redacción de los proyectos y demás trámites a los ayuntamientos, se persigue hacer más obras en el mismo tiempo, tras constatar el significativo retraso que lleva el Consell en la erradicación de los barracones.

Alcaldes consultados por este diario celebraban la medida porque en sus localidades esperan desde hace muchos años nuevos centros o arreglos que no llegan. «Ciegsa se ha convertido en un agujero negro y estamos esperanzados en erradicar unos de los primeros barracones que se instalaron en la provincia, en el IES García Berlanga de Sant Joan, además de ampliar el colegio Lo Romero, donde los niños de Infantil están hacinados porque no hay más espacio», destacaba el alcalde de Sant Joan, Jaime Albero, tras asistir a la presentación de «Edificant».

«Valorarán cada proyecto en su conjunto y los ayuntamientos que no tengamos funcionarios para poder agilizar los trámites de redacción y demás, como es nuestro caso, podremos contratarlo fuera, pero se hará cargo del coste la Generalitat», indicó aliviado este mismo alcalde.

La advertencia del conseller al respecto se concretó en que no habrá problema alguno en esta externalización si la obra se da por concluida con el dinero adjudicado desde un principio, porque también señaló que cualquier sobrecoste correrá a cargo de los ayuntamientos y que incluso si existe algún excedente, porque alguna licitadora ofrezca la obra por menos dinero y se le adjudique, los posibles excedentes económicos también tendrán que revertirlos los ayuntamientos en mejoras del centro de que se trate.

Germen

Desde el Ayuntamiento de Alicante el alcalde, Gabriel Echávarri, se atribuye la primera piedra de este proyecto tras el acuerdo al que llegó con Puig para repartir a medias el coste de dejar a punto de revista todos los colegios de la ciudad en un plazo de dos años. «Ya entonces lo presupuestamos en 8 millones de euros entre ambas administraciones y desde entonces nuestros técnicos han adelantado el trabajo y están listos muchos proyectos», aseguraba ayer.

Echávarri celebró, al igual que su homólogo de Sant Joan, la posibilidad de «externalizar» o privatizar los proyectos necesarios ante la falta de personal en ayuntamientos que, como el de Alicante, tienen las cuentas intervenidas y no puede contratar más funcionarios.

«Ya hemos celebrado reuniones técnicas conjuntas, en noviembre nos adheriremos al proyecto y a lo largo de 2018 esperamos que se pueda empezar a actuar en todos los colegios, concreta el alcalde Echávarri.

Para la Generalitat los centros más urgentes son los que ya figuraban en el primer mapa escolar que elaboró la Conselleria de Educación en 2015 para erradicar los que están integramente en barracones y, a continuación, los que tienen alguna prefabricada.