La dotación extra de profesorado de inglés es el principal escollo que encuentran en los colegios e institutos para poder llevar a cabo el plurilingüismo que contempla la nueva proposición de ley presentada por el conseller de Educación para el curso que viene.

Los portavoces de los directores tanto provinciales como autonómicos, y de Primaria y Secundaria, coinciden en celebrar el contenido de la nueva ley porque opinan que cierra los temas conflictivos a nivel tanto social como jurídico y les permitirá «trabajar y organizarnos para tener a punto los nuevos programas lingüísticos antes de que empiece la matrícula del curso que viene», como precisa el vicepresidente autonómico y director del colegio Fabraquer de El Campello, Ginés Pérez.

Mientras la enseñanza de asignaturas en valenciano está asegurada hasta el máximo de horas que contempla la citada norma, de hasta un 50% e incluso un 60% como tope en los centros de Primaria que querían poner el plurilingüismo avanzado, con el inglés no será tan fácil porque la formación de los docentes no se consigue de la mañana a la noche.

Los directores señalan que al menos dispondrán de una hoja de ruta de forma que puedan ir introduciendo más enseñanza en inglés conforme dispongan de docentes, porque, de momento, a lo que pueden llegar es al 15% mínimo contemplado en la nueva ley todavía por aprobar por Las Cortes.

«Lo principal es que se desvincula la enseñanza en inglés de la del valenciano y todos los alumnos tendrán el mismo aprendizaje en cada centro», concreta el representante de los directores en el Consejo Escolar, Miguel Andreu.

En los centros que parten de la mayoría de su enseñanza en castellano podrán llegar hasta el 50% o 60% de las asignaturas en esta lengua, y deberán impartir al menos el 25% en valenciano, lo que implica dar la asignatura de valenciano y otra distinta también en valenciano. «Prácticamente todos dan valenciano y otra asignatura también en valenciano, de modo que el cambio más apreciable vendrá dado por el inglés, añade Andreu.

Metodología

Pérez confía en que con la nueva normativa «se rebajen las tensiones y podamos ponernos a trabajar en la competencia lingüística e los alumnos, que el objetivo principal para que en sexto de Primaria dominen el castellano y el valenciano y obtengan un dominio funcional del inglés.

Los auxiliares nativos de conversación comprometidos por la conselleria que dirige Vicent Marzà ,a partir del año que viene en la totalidad de los colegios públicos, reconocen en los centros que serán un apoyo muy importante para la competencia oral de los alumnos, «pero no resuelve la necesidad de profesores formados par aplicar la metodología de la enseñanza en lenguas, porque no es lo mismo enseñar únicamente inglés que compartirlo con otras dos lenguas como castellano y valenciano en todos los niveles», concreta este representante de los directores.

En Secundaria, también el presidente autonómico y provincial de los directores, Toni González Picornell, apunta al horizonte del curso 2020-21, dentro de tres años, para poder disponer de los profesores necesarios de inglés: «Al menos uno más en cada instituto», contabiliza.