Marmarela, el complejo de ocio ubicado en el Puerto que dará servicio durante la Volvo a los invitados de la Generalitat, registró ayer un escrito en el Ayuntamiento de Alicante en el que insta al vicealcalde y concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, a reconocer la legalidad del complejo de ocio. La empresa de basa en un certificado del Ministerio de Fomento que demostraría, a su juicio, que el Plan de Utilización de los Espacios Portuarios (Puep) está en vigor desde 2006, «en contra de lo que en su día dictaminó la Concejalía de Urbanismo, lo que propició en los primeros meses de funcionamiento del local un perjuicio para sus promotores por la inseguridad jurídica creada».
En el documento, la promotora de Marmarela pide a Pavón la «apertura de una investigación interna que permita depurar responsabilidades y reconocer la legalidad» de un complejo que reabrió este fin de semana bajo licencia de la Generalitat. La Policía Local levantó acta tras detectar el reinicio de la actividad.
Por otro lado, la mercantil Puerta de Mar y Ocio exige a Pavón que se «retracte» de las declaraciones en las que justificó el cierre del complejo decretado hace diez días, en las que justificada el decreto de clausura por «carecer de licencia municipal». Según los promotores, esas palabras crearon una «alarma social injustificada al asegurar que si ocurriera cualquier percance con efectos sobre la vida o integridad de las miles de personas [...] el último responsable iba a ser el Ayuntamiento». La empresa, por último, insistió ayer en que emprenderá acciones legales contra Pavón, que se sumarían a las iniciadas contra la Autoridad Portuaria en el Tribunal Superior de Justicia.
